Córdoba CF
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Crónica
No, hoy tampoco hay punto de inflexión
“No quedan más balas”, dijo Simo a lo largo de la semana con mucha certeza y siendo totalmente trasparente. Y es que el Córdoba CF viajaba hasta Fuenlabrada para medirse a un conjunto madrileño que también estaba inmerso en una crisis de resultados muy grande, pero no es excusa. La entidad blanquiverde tenía que demostrar tarde o temprano que tiene las condiciones oportunas para pelear por los primeros puestos del Grupo I de Primera RFEF, aunque lo visto en encuentros anteriores no dejaba mucho al optimismo. Los chicos dirigidos por Germán Crespo no entraron del todo mal al partido, pero, como lleva ocurriendo durante los últimos duelos, la irregularidad defensiva fue nuevamente protagonista.
Un encuentro que comenzó con ambos equipos queriendo evitar los errores a toda costa. No era para menos. Se enfrentaban los dos peores clubes del Grupo I y la oportunidad de resarcirse con una victoria urgía tanto a una plantilla como a la otra, pero fue el CF Fuenlabrada el que quiso dominar en los primeros compases, sin mayores peligros para la portería defendida por Carlos Marín, eso sí. Aun así, el Córdoba CF se sintió más cómodo conforme los minutos seguían pasando e incluso realizando esa presión que le caracterizaba en los primeros meses de competición, lo que provocó que Carracedo probase fortuna con un disparo que desvió la zaga fuenlabreña.
Sin embargo, la irregularidad del Córdoba CF seguía estando latente. Ya no era un equipo seguro como antaño y los errores defensivos sucedían. En primera instancia, Jorge Moreno perdió la marca en un centro lateral del Fuenlabrada y dejó totalmente solo a un rival que acabó rematando desviado. Por otro lado, Gudelj se perderá el próximo encuentro ante la Cultural y Deportiva Leonesa después de ver una tarjeta amarilla al perder un balón en el centro del campo cuando el Córdoba CF hilvanaba jugada. Una sucesión de acciones que provocó que el conjunto madrileño diese un paso al frente en busca del gol inaugural.
Esta tendencia se incrementó en el tramo final de la primera mitad. El CF Fuenlabrada se sentía muy cómodo sobre el Fernando Torres, después de una semana convulsa y donde todo apuntaba a que este encuentro iba a ser un mero trámite para comenzar a consolidar la estructura del futuro a corto plazo, pero nada más lejos de la realidad. Los pupilos dirigidos por Alfredo Sánchez avisaron en primer lugar por medio de un Iban Salvador que remató en área blanquiverde y cuyo disparo tuvo que ser despejado por Gudelj bajo palos. Aun así e instantes después, Álvaro García se inventó un misil teledirigido para marcar un auténtico golazo a diez minutos del descanso.
Como era de esperar, este tanto sentó como un auténtico jarro de agua fría a un Córdoba CF que estaba inmerso en una dinámica muy negativa, sin alzar cabeza y con la sensación de que los brazos estaban más que bajados. En cambio y en el tramo final de la primera mitad, con más corazón que cabeza, los chicos dirigidos por Germán Crespo llegaron con algo más de sentido al área de Craninx e incluso Jorge Moreno cabeceó un gran centro de Kike Márquez, pero ese balón fue repelido por el palo del arco madrileño antes de que el colegiado decretara el final de los primeros 45 minutos.
Contra todo pronóstico, lo visto durante la primera mitad fue la cara menos mala del conjunto blanquiverde. La segunda dejó un panorama aún más desolador, con un Córdoba CF inoperante, sin ideas, sin confianza y sin esa ambición propia de un equipo que quería llegar a luchar por ese puesto de ascenso directo a Segunda División. No. No había de eso. Ni de esas ganas de que esta mala racha solo fuese efímera. De hecho, la intensidad tampoco estaba presente en el Estadio Fernando Torres y eso provocó que hubiese un nuevo error en la salida de balón que aprovechó Cristóbal Márquez para cerrar prácticamente la victoria.
Nadie firmaba el empate, solo valía ganar, pero ni por esas. El Córdoba CF ha entrado en una dinámica de resultados negativa en la que, antes o después, se terminen dando decisiones drásticas ya sea en una posición u otra. A lo mejor no surte efecto ni es la solución que debiese, pero lo que es cierto es que la entidad blanquiverde peleaba por la primera posición y ahora por no salir de la zona de play off. Es el objetivo a ciencia cierta, sí, pero las sensaciones invitan a que tampoco será la meta por la que peleará la escuadra califa de seguir esta tendencia. Aún quedan 14 jornadas. Solo 42 puntos.
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