El balonmano cordobés pone los cimientos de una nueva era
El AX Puente Genil estrenará la Asobal con Antonio Ortiz en el banquillo y el Adesal perfila su plantilla para competir en la ABF
Apenas hace unas semanas que disputaron los partidos más importantes de su historia y ya andan enfrascados en la construcción de la nueva vida que les aguarda, un periodo apasionante con mayores gastos, exigencias y repercusión social. Por primera vez, dos clubes cordobeses del mismo deporte en categoría masculina y femenina disputarán un campeonato de máximo nivel. Ocurrirá en la campaña 13-14. El Ángel Ximénez de Puente Genil, que obtuvo su plaza en la Liga Asobal tras una épica victoria en el pabellón de Artaleku ante el anfitrión, el Bidasoa Irún, y el Adesal La Fuensanta, que arrasó en la segunda fase de Valladolid para proclamarse campeón nacional y acceder a la ABF femenina, ya perfilan sus planes para prolongar su idilio con el éxito. A ninguno le falta ambición. Los pontanos han acometido los necesarios retoques en su estructura deportiva y ya tienen en marcha una singular campaña para captación de abonados. En el club femenino de la capital, la composición del plantel se está estudiando con detalle pues las pretensiones de futuro están muy alejadas de la mediocridad. “Nos ha dicho Rafa (Moreno, el entrenador) que en un año estaremos en competiciones europeas”, comentaban las jugadoras al final de la excelente temporada del Adesal. Con sonrisas, pero sabiendo que el técnico no estaba de broma.
El AX Puente Genil ya tiene a su entrenador para afrontar el bautismo en la élite del balonmano español. Su presidente, Mariano Jiménez, alcanzó esta semana un acuerdo con Antonio Ortiz para que el antequerano se convierta en el jefe del vestuario para el curso 13-14. Una vez descartada la continuidad de Javier Elvira, el héroe del ascenso, quien por cuestiones laborales comunicó al club la imposibilidad de simultanear ambas actividades, el Puente Genil recurrió a un hombre con un interesante perfil. Conoce el balonmano de cantera y también ha dirigido en la Asobal al equipo de su tierra, el Antequera, con el que no pudo conseguir la permanencia. Ahora llega la tarea de confeccionar el grupo, en el que por motivos de trabajo no podrán seguir jugadores como Nico Godoy, Pepe Pozo o Santiago. Se pretende mantener el bloque que conquistó el ascenso, aunque está pendiente una evaluación más pormenorizada por parte del nuevo cuadro técnico antes de tomar decisiones.
Una vez recogido el confetti y con los ánimos más calmados, el Adesal La Fuensanta ya se ha metido de lleno en la preparación de una formación competitiva para disputar la próxima edición de la ABF, máxima categoría del balonmano femenino español. Rafa Moreno, técnico del equipo, estudia las opciones en el mercado con tiento, puesto que aún no se han garantizado los respaldos económicos que hagan viable el proyecto. Pese a todo, hay confianza en este aspecto y no se duda en que será posible, con esfuerzo, acometer unos gastos superiores a los del campeonato anterior con un incremento razonable en el presupuesto. En el equipo de La Fuensanta seguirán Cristina Gabaldón, Inés Hernández, Alba Sánchez, Esperanza López, Merche Fernández, Meriem Ezbida, mientras que se valora la permanencia de jugadoras que han sido claves en el campeonato del ascenso como la húngara Adrienn Kovacs y Leyre Vázquez.
En los otros clubes más representativos del balonmano cordobés también se están produciendo movimientos. Al ARS de Palma del Río le esperan nuevos horizontes después de una alteración drástica en todos los órdenes. Tras el descenso de la Liga Asobal, su presidente durante los últimos 14 años, Manuel Cumplido, anunció el abandono del cargo para dejar paso a nuevos aires. Antonio Muñoz es el único candidato al puesto de máximo rector en el club palmeño. Su primera misión será buscar un entrenador, puesto que César Montes, que ha permanecido en el banquillo durante cuatro años, puso fin a su ciclo. En la capital, el Córdoba BM tendrá a partir de junio un nuevo presidente en la persona de Martín del Rosal, que suplirá a Juan Pablo Gisbert. Se espera que se produzca una transición sin traumas en una entidad que mantiene su sello como una de las mejores plataformas de cantera de Andalucía.
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