El juicio que nunca empieza: se vuelve a suspender la sesión contra unos ecologistas que llevan 17 años procesados

17 años. Ese es el tiempo que llevan formalmente procesadas 15 personas en Córdoba, por una causa penal por la que se enfrentan, como mucho, a dos años y medio de cárcel cada uno. El inicio del juicio por el caso del camino de Los Torilejos, en Posadas, se ha vuelto a suspender. Y no tiene fecha.

El caso se remonta al mes de septiembre del año 2007. El día 14 de aquel mes, un numeroso grupo de vecinos y ecologistas protestó en el conocido como camino de Los Torilejos, para denunciar que la familia Sánchez Ramade había instalado una valla para cortar el acceso a las inmediaciones de una finca de su propiedad. El camino es hoy público. El Tribunal Supremo ratificó numerosas sentencias y decisiones municipales señalando que la valla era ilegal y que el acceso no se podía cortar. De hecho, el tránsito en Torilejos es hoy público.

Pero aquel 14 de septiembre de 2007 la valla estaba protegida por un fuerte dispositivo de la Guardia Civil, que acabó disolviendo una protesta ciudadana en mitad del caos. Las cargas policiales se extendieron desde el campo hasta el interior del pueblo, donde hubo persecuciones, detenidos, golpes y heridos. Un guardia civil perdió un ojo. Los jueces llegaron a condenar al destierro a los que consideraban como los cabecillas de aquellos disturbios. Y el caso acabó en los tribunales.

El Ministerio Fiscal acusa a un total de 15 personas, casi todos vecinos de Posadas, de delitos de desórdenes públicos, atentado a agentes de la autoridad utilizando armas u otros instrumentos peligrosos, lesiones, siete faltas de lesiones y un delito de daños. De media, a cada uno se le pide unos dos años y medio de cárcel para un caso que se ha alargado muchos años en el tiempo.

Tras un largo proceso en el que ha habido una infinidad de jueces de instrucción y hasta la revocación de una magistrada, el caso iba a ser visto finalmente por el Juzgado de lo Penal número 4 de Córdoba. Se había reservado la sala de vistas para un proceso que iba a durar cinco días. Pero la enfermedad de uno de los letrados ha obligado a suspender, una vez más, el inicio del juicio. Y, de momento, no se ha señalado nueva fecha, tal y como han informado a este periódico fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).

El caso ha llevado a dos vocales de la Sección de Vías Pecuarias del Consejo de Medio Ambiente de la Comunidad Castellana de Madrid, Hilario Villalvilla Asenjo y Luis de Andrés del Pozo, a presentar un escrito dirigido al Juzgado en el que se reclama la absolución de todos los acusados. La principal reclamación se basa en unas dilaciones infinitas. Son 17 los años que han pasado de unos hechos para una causa en la que no se piden grandes penas de prisión. En este caso, se argumenta, se considera que el estar procesado durante tantos años es peor que la pena que se puede recibir en un juicio.

El escrito asegura que “los vecinos encausados defendieron en todo momento la legalidad vigente en materia de defensa de la propiedad pública del suelo del Camino de dominio y uso público de Los Torilejos que había sido cerrado ilegalmente por el propietario de un predio particular” e incluso invoca a dos artículos de la Constitución, el 19 y el 45.

Lo que ocurrió en Posadas sí que tiene una condena, pero no por la protesta, sino por lo que pasó en un bar horas después, cuando la Guardia Civil acudió a identificar a varios de los sospechosos. Entonces hubo cargas y peleas, que acabaron con cuatro personas identificadas y posteriormente condenadas a entre 18 meses de cárcel y a tres años de prisión por atentado contra la autoridad. Esta sentencia llegó diez años después de los hechos. Pero el juicio general aún no ha comenzado 17 años después. Y va ya camino de cumplir 18 años de espera.