El embalse del Guadalmellato vuelve a abrir compuertas para soltar agua

La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) ha vuelto a ordenar la apertura de compuertas del embalse del Guadalmellato, casi lleno tras las últimas lluvias. El pasado 30 de enero ya se abrieron por primera vez las compuertas para el desembalse y, ahora de nuevo se ha vuelto a hacer para mantener el nivel para mantener por debajo del 90% la capacidad del embalse.

Los técnicos de la Confederación realizan esta operación para que el embalse se mantenga más próximo al 85% de su capacidad y así tenga margen ante una nueva avenida de agua. Desde mediodía de este viernes, el Guadalmellato viene desembalsando agua a razón de 15 metros cúbicos por segundo.

Toda el agua que suelta este embalse no va al río Guadalquivir ni se pierde, sino que se vierte directamente en otro pantano: el de San Rafael de Navallana. Este embalse tiene capacidad suficiente como para acoger gran parte del agua procedente del primero y, actualmente, se encuentra al 50%.

Ahora, San Rafael de Navallana también seguirá subiendo gracias al desembalse, mientras que el Guadalmellato estaba a más del 92% y suelta agua. Por otro lado, el embalse del Bembézar está cerca del 75% y el de Iznájar se acerca al 25% de su capacidad.

El Guadalmellato es un embalse que se usa principalmente para abastecer a la ciudad de Córdoba. Navallana suministra al canal del Guadalmellato y a miles de hectáreas de regadío del Valle del Guadalquivir. Ahora mismo, entre ambos tienen una reserva suficiente como para abastecer a la ciudad durante cuatro años y para garantizar el regadío de dos veranos más.