La Policía hará al menos un control diario de alcoholemia en Navidad

El Área de Seguridad asegura que se intentarán montar hasta dos dispositivos al día y que podrían ser en horario de mañana

Cada día en cualquier punto de la ciudad y casi a cada hora puede haber una patrulla de la Policía Local de Córdoba montando un dispositivo de control de alcoholemia durante las fiestas navideñas. De hecho, habrá días en que serán dos los controles. Incluso, habrá jornadas en que estos controles puedan ser también por la mañana temprano, cuando muchos conductores regresan después de una fiesta que ha durado más allá de la madrugada o cuando otros aprovechan para tomarse el primer trago de la jornada y coger el coche.

La concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Córdoba, Carmen Sousa, ha presentado esta mañana el Plan de Seguridad y Tráfico para la Navidad que cada año activa el Consistorio. Entre otras cosas, este dispositivo prevé que en la medida de lo posible trabajen todos los efectivos disponibles policiales, salvo aquellos que estén de descanso (no días libres, sino los dos días de descanso a la semana obligatorios) o enfermos. Como siempre, el gran control es el de la seguridad del tráfico. Y como siempre, el de intentar que los conductores no vayan bebidos. Por eso, Sousa dijo que desde hoy mismo y hasta el próximo 6 de enero habrá un control de alcoholemia diario como mínimo. Los días de más intensidad (fiestas y fines de semana) puede haber hasta dos.

Además, también funcionará el radar, que también podrá colocarse en cualquier punto de la ciudad y a cualquier hora.

Durante las fiestas, vigilarán la ciudad todas las patrullas disponibles (siete en coches y nueve motorizadas por turno). Además, habrá dos que se dedicarán a vigilar el comercio ambulante. El objetivo es que siempre esté presente una patrulla en todas las zonas de mayor afluencia comercial de la ciudad, según explicó Carmen Sousa. Por otra parte, también se reforzará la vigilancia en materia de pirotecnia. Los agentes distribuirán el bando con la ordenanza que regula el uso de fuegos artificiales y petardos por los locales que los pueden vender, y también denunciarán a los que los lancen sin permiso.