La comisión de expertos propone un Museo de la Mezquita en el CRV y trasladar allí las taquillas

El informe sobre la titularidad de la Mezquita Catedral elaborado por el comité de expertos liderado por Federico Mayor Zaragoza entra en el fondo de otra cuestión que ha venido a denominar como una “propuesta de actuación patrimonial”. Entre otras medidas, se plantea directamente la creación en el Centro de Recepción de Visitantes (CRV) de la Puerta del Puente de un Museo de la Mezquita, siguiendo una idea de los años veinte del siglo pasado y el traslado allí, entre otras dependencias, de las taquillas del monumento.

Actualmente, el Cabildo trabaja en un proyecto para la construcción de un centro de interpretación del monumento en el Palacio Episcopal, al que tiene previsto trasladar también las taquillas de la Mezquita Catedral. El proyecto está en la Gerencia Municipal de Urbanismo pendiente de la licencia de obra. El presidente de la Gerencia, Pedro García, tiene también la responsabilidad de Turismo y la gestión del Centro de Recepción de Visitantes.

“Resulta evidente que la Mezquita Catedral sufre graves carencias, algunas de las cuales ya fueron detectadas por Rafael Castejón en un artículo publicado en 1928, para las que resulta totalmente necesario buscar soluciones”, exponen los expertos. “Si ya existía la necesidad hace 90 años, hoy resulta poco asumible que un edificio que es Patrimonio Cultural de la Humanidad se gestione en pleno siglo XXI conforme a modelos del siglo XIX”, critican.

“Por ello, entre los objetivos que consideramos prioritarios está la eliminación de las antiguas carencias a las que ya se refería Castejón en el artículo que dedicó en Córdoba Gráfica a El Museo de la Mezquita (30 de abril de 1928)”, citan estos expertos, que han estado un año elaborando el informe. “En líneas generales, un monumento de tal amplitud y complejidad requiere, según Castejón, continuas obras de conservación o restauración, ya que diariamente aparecen nuevos problemas. Esta afirmación continúa siendo válida hoy en día, lo que hace necesario el diseño de un plan de conservación a medio y largo plazo que contemple no sólo las actuaciones de restauración necesarias, sino también un programa de conservación preventiva”.

Los expertos aluden a “un grave problema señalado en el artículo de hace 90 años, y que todavía arrastra el monumento”: la falta de dependencias “para servicios necesarios, entre los que Castejón mezclaba los relacionados con el culto con los necesarios para la visita pública al monumento: sacristía, sala capitular, archivo, biblioteca, tesoro, baños públicos y otras”. En ese artículo ya se planteaba la construcción de un “Museo de la Mezquita” en un edificio de propiedad estatal con el que interpretar un monumento único, algo que 90 años después todavía no se ha hecho. Medina Azahara, por ejemplo, tiene su propio centro de interpretación, en el que se recibe a los turistas y se les explica el yacimiento.

Ante la falta de un espacio de propiedad estatal disponible, los expertos proponen que ese museo se instale en el cercano Centro de Recepción de Visitantes, “que nos permitiría agrupar todos esos servicios necesarios (taquillas, guardarropa, aseos, materiales de difusión e interpretación del monumento, servicios administrativos, espacio para investigadores, museo…) sin necesidad de esperar a costosos nuevos proyectos que, además, dilatarían innecesariamente en el tiempo la solución a estas carencias”, señalan en el documento.

“Como beneficio secundario, no podemos obviar que esta actuación mejoraría la percepción del visitante, contribuyendo así al aumento de calidad de la oferta cordobesa para el turismo cultural y patrimonial”, insisten. Y para lograrlo tienen claro que hace falta la creación de un “patronato” en el que estén todas las administraciones, el Cabildo y también las universidades.

“Desde esta comisión estamos convencidos de que, al igual que la polémica creada a comienzos de los años 70 terminó produciendo el magnífico resultado del apoyo expreso del ICOMOS que permitiría la declaración del monumento como Patrimonio de la Humanidad, el actual debate puede servir a la sociedad cordobesa para reflexionar sobre los problemas que afectan al edificio y diseñar un sistema que ayude a garantizar su conservación y a mejorar las condiciones en las que la sociedad puede disfrutar de nuestra Mezquita Catedral”, concluyen.