Las dos candidaturas tensan al PP de Córdoba
En Sevilla, el PP ha logrado pactar que en la futura dirección del partido se integren las dos candidaturas que se presentan a las elecciones internas. En Córdoba, después de las declaraciones de Rosario Alarcón de este miércoles, la carta que ha enviado a la Comisión Organizadora del congreso provincial y la reacción a la misma, se antoja difícil que ocurra lo mismo. El PP de Córdoba se ha tensado, y mucho, en las últimas horas, en un cruce de declaraciones (más hacia dentro que hacia fuera) que no se escuchaban desde que una gestora se hizo cargo del partido tras la destitución de Enrique Bellido como presidente provincial, hace década y media.
Las dos candidaturas están poniendo toda la carne en el asador. Especialmente lo está intentando Rosario Alarcón. La parlamentaria ha iniciado hasta una campaña de publicidad en Facebook en la que hasta publica su número de teléfono (el que le facilita el Parlamento, por cierto) donde responde a los afiliados del PP de Córdoba y sus dudas. Adolfo Molina cuenta con el respaldo del aparato del partido y el más importante de todos, el del presidente saliente José Antonio Nieto.
La tensión durará poco. O eso parece. El 8 de mayo están llamados a votar los inscritos al PP de Córdoba, unos 12.000, aunque se calcula que solo 4.000 están al día en el pago y son los que realmente participarán. Ese día ganará un candidato. Los estatutos del PP lo dejan claro: si alguno supera el 50% de los votos será proclamado candidato único al congreso provincial de junio. Solo hay dos candidaturas: el que obtenga un voto más que el otro superará el 50%.
A diferencia de Sevilla, en Córdoba los puentes entre candidaturas están dinamitados. En su rueda de prensa de presentación de la candidatura, Rosario Alarcón llegó a hablar de “falta de transparencia” en el PP cordobés. La candidatura de Adolfo Molina y la propia presidenta de la comisión, María Luisa Ceballos, respondieron a Alarcón negando esta acusación. Sin querer dar nombres, fuentes del entorno de Molina consideraron “vil” la actitud de Rosario Alarcón y criticaron su intención de “morir matando”.
Es decir, en el caso probable de que Rosario Alarcón no logre imponerse sobre Adolfo Molina (en avales, el segundo sextuplica a la primera), va a ser complicado integrarla en la futura dirección. A no ser que intervenga el presidente regional del partido, Juanma Moreno. Rosario Alarcón es la portavoz adjunta del PP en el Parlamento de Andalucía y una persona de confianza de Moreno (quien, no obstante, ya ha manifestado su apoyo al propio Molina).
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