Por cualquier juego de la mente, ha sido escribir “abrigo” y me ha venido a la cabeza aquello de “abrigar esperanzas”. El frío no se quita solo, sino con recursos, acciones, solidaridades, revoluciones, además de con ropa adecuada. Y en este punto, ¿qué prenda será más cálida, más sostenible, duradera, transpirable? ¿Cuál será mejor para mí y la vida que hago? Esta pregunta hay que hacérsela, claro, antes de aumentar la familia que habita los armarios.
Cada cual tendrá sus criterios al respecto. Los míos son: eficacia (que abrigue, vamos), comodidad, adaptabilidad a los cambios de temperatura (no quiero empezar a sentir el bochorno del poliéster en lugares con calefacción), inmunidad al pelaje de mascotas, precio razonable y que dure, por bien hecho y porque su diseño no es flor de TikTok.
De lo nuevo en esta temporada otoño-invierno 2022-2023, Oysho acierta con la oferta más innovadora, diversa y didáctica que podemos encontrar en el terreno de lo asequible. Por ejemplo, el material FLOWER DOWN®, de sus chaquetas largas de relleno ligero, está elaborado con un 50% de Kapok, 25% plumón reciclado y 25% pluma reciclada. “La fibra Kapok se obtiene del árbol del mismo nombre que crece libremente en bosques tropicales sin estar sujeto a cultivos masivos, riego artificial o pesticidas”, se explica en la web, donde también detallan que es un “tejido transpirable, repelente al agua y con protección frente al viento. Soporta temperaturas extremas de entre -1º y -37º”. ¡Toma ya!
Otros espacios interesantes para dar con un nuevo abrigo son El Corte Inglés, The North Face, Barrabes o Berg Freunde. En las alturas del lujo, Moncler, MYTHERESA, Loro Piana y Falconeri. Y para los entrañables amigos: abrigos para mascotas como los de H&M.
Acaso toca pasar revista y valorar si necesitamos o no necesitamos en realidad alguna prenda más que nos proteja de los fríos. El corazón en buena compañía sí que es imprescindible.
Nota: Las menciones a marcas y productos no llevan aparejada ninguna contraprestación
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