Soy docente, he trabajado siempre en la Enseñanza Pública, he tenido muchísim@s alumn@s a lo largo de mi vida profesional, la gran mayoría buenos estudiantes.
Hace unos días me encontré a uno de ellos, estaba muy deprimido; me explicó que el primer examen de las oposiciones de E. Secundaria lo había aprobado con un siete con cuatro de nota media, pero lo habían invalidado quedando fuera del proceso porque se le olvidó numerar las dos últimas páginas; justo cuando dieron la orden de dejar de escribir se dio cuenta y se lo comentó a uno de los miembros del tribunal y éste le dijo: No tiene importancia, no pasa nada.
Esta persona no defendió ante los demás componentes su palabra de “ no tener importancia”. Mi alumno habló con la presidenta, le explicó lo ocurrido, ella le dijo que presentara una alegación, pero no ha servido de nada.
Yo no comprendo que se pueda invalidar un buen examen por esa insignificancia.
¿Los componentes del tribunal no tienen humanidad? Ell@s están ahí porque también hicieron posiciones ¿ya no se acuerdan del estado de nervios, ansiedad y preocupación que tienen en un examen de cuatro horas y media en el que te estás jugando un trabajo? ¿No les hubiera gustado que su tribunal hubiese sido comprensivo y compasivo ante un despiste así si les hubiera ocurrido a ell@s.
Yo como docente valoro muchísimo más un buen examen y no doy importancia a un despiste que está claro que lo es puesto que el resto de folios iban numerados.
Sé que en otros tribunales también se han invalidado exámenes por despistes insignificantes ¿qué está pasando?
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