Golpe de realidad

Un duro enfrentamiento para seguir su particular andadura en la segunda vuelta del campeonato regular. El Córdoba Patrimonio de la Humanidad visitaba el Palacio Municipal de los Deportes de Son Moix para medirse al Palma Futsal con el objetivo de dejar a un lado la posible clasificación para la Copa de España y los cuartos de final de la Copa del Rey que disputará el próximo martes en el Palacio Municipal de los Deportes de Vista Alegre ante el Industrias Santa Coloma. Los chicos comandados por Josan González debían centrarse en el tramo liguero y sabían que eran capaces de dar la campanada ante uno de los máximos aspirantes para llevarse el título de Primera División, aunque las complicaciones llegaron pronto.

A pesar de la dificultad que entrañaba, el choque arrancó con un Córdoba Patrimonio de la Humanidad queriendo dominar a uno de los favoritos para luchar por la corona de la máxima categoría de este deporte a nivel nacional. El cuadro dirigido por Josan González intentaba acercarse a la meta de Fabio, pero el conjunto local tenía mucha pólvora en pista y la aprovechó al instante. Eloy Rojas cabalgó por banda izquierda, superando a Ricardo Mayor y su pase al segundo palo fue introducido en la portería por Pablo del Moral al intentar despejar, convirtiendo así el primer tanto del Palma Futsal en el Palacio Municipal de los Deportes de Son Moix.

Aun así y lejos de quitar el pie del acelerador, el equipo balear fue directo a por el segundo y, después de una doble ocasión obra de Cainan e Higor, Eloy Rojas, el más activo del encuentro en estos primeros compases, incrementó la ventaja en el marcador gracias a un tiro cruzado al que nada pudo hacer Alfonso Prieto. A partir de este duro golpe, el Córdoba Patrimonio de la Humanidad parece que despertó en la zona ofensiva e incluso Ismael a punto estuvo de aprovechar una buena recuperación de Álex Viana en campo rival, pero el disparo del cordobés se marchó desviado de la meta defendida por Fabio.

Sin embargo, el Palma Futsal iba a asestar un nuevo varapalo en los últimos instantes de la primera mitad, ya que Chaguinha, tras una buena acción individual, superó al guardameta blanquiverde y subió el tercer tanto al luminoso, haciendo que el club cordobés se fuese al paso por vestuarios con una desventaja muy significativa para intentar responder a lo largo de la segunda mitad.

La vuelta de ambos conjuntos a la pista balear dejó la misma tónica que la transcurrida durante los primeros 20 minutos del choque. El Palma Futsal quería seguir incrementando la distancia en el electrónico y los de Antonio Vadillo retornaron de vestuarios con el mismo hambre. De hecho, Chaguinha volvió a probar a Prieto con un disparo colocado, pero el guardameta madrileño blocó esta acometida. Por su parte, el Córdoba Patrimonio de la Humanidad tenía la intención de encontrar ese gol que le metiera de nuevo en el partido y Viana tuvo en sus botas recortar la distancia en el marcador, aunque Fabio estuvo atento bajo los palos.

Conforme los minutos iban pasando, el cuadro dirigido por Josan González iba creciendo tanto a nivel defensivo como ofensivo y comenzó a asediar con mucha intensidad la portería de Fabio. De hecho, tanto Zequi como Shimizu o Viana estuvieron a punto de inaugurar el marcador cordobés, pero el arquero del Palma Futsal resolvió a la perfección cualquier acometida visitante. Aun así, el cuadro local quería certificar la victoria y un error grave de Prieto regaló el gol a un Marlon que superó a la defensa blanquiverde con un disparo elevado desde el centro del campo.

A partir de este momento, el Córdoba Patrimonio de la Humanidad comenzó a atacar con portero jugador, pero no alteró la tónica, ya que, antes de finalizar el encuentro, los de Antonio Vadillo subieron el quinto tanto desde el doble penalti merced a un buen disparo de Mancuso, haciendo inútil el gol de Alberto Saura por parte califal. Esta derrota significa un golpe duro para una entidad blanquiverde que tiene que resarcirse lo antes posible y el próximo martes tiene una oportunidad de oro para conseguirlo.