Córdoba Futsal
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Crónica
El Córdoba Patrimonio prolonga su sonrisa
Luchar para ganar. Lo dice el himno compuesto por Manuel Ruiz Queco para el Córdoba CF, y que de un tiempo a esta parte también se lo ha hecho suyo el Córdoba Patrimonio de la Humanidad, que deberá aplicar siempre ese lema siempre hasta el último instante para ir creciendo en una temporada que ha comenzado de forma muy irregular. Con todo, los cordobeses ya han podido acumular sus primeras dos victorias consecutivas, ya que a la del pasado fin de semana frente al Manzanares se une el triunfo trabajado en los dieciseisavos de final de la Copa del Rey ante la UA Ceutí.
Se había avisado que iba a ser un duro compromiso y de ello dio buena cuenta Cristian, sometido por el ímpetu local durante los primeros compases. Y es que la energía fue mayor en los ceutís, que comenzaron a acumular sus primeros acercamientos en la portería cordobesa. Sin embargo, la mayor calidad de los blanquiverde se hizo notar muy pronto, ya que Ismael inauguró el luminoso a los cuatro minutos de partido. Un 0-1 que no rebajó en absoluto el ánimo local, pues seguían confiando en sus posibilidades y a base de rebeldía continuaban acechando la potería califa, ante lo cual tuvo que intervenir Cristian con una doble intervención, primero con una mano salvadora y poco después sacando de forma milagrosa el pie para evitar el empate.
Sin duda, las oportunidades eran mayoritarias en el banco africano, aunque la pegada era del Córdoba Patrimonio, que cercano al diez de juego puso el 0-2 con un buen remate de Pablo del Moral tras un rechace del zaguero local. Lo cierto es que necesitaban muy poco los de Josan para generar buenas oportunidades de gol. Y es más, esas las materializaban. El que no pudo acertar a continuación fue de nuevo el cierre madrileño, que rozó el tercero en una buena contra en la que se quedó solo ante el portero, pero no pudo acertar dentro de las mallas.
El duelo continuó con el mismo guion. Ventaja para los visitantes, pero intensidad y verticalidad perenne en el bando local que, a falta de algo más de cuatro minutos para el descanso, encontró la recompensa en una notable acción individual de Everton, en la que el brasileño encaró la portería y batió a Cristian con un potente disparo directo a la escuadra. Un tanto que no hizo más que mejorar el rendimiento de la UA Ceutí, ahora con la motivación incentivaba tras el gol. De hecho, logró igualar la contienda de falta directa botada por el propio Everton, cuyo golpeo, para infortunio del Córdoba Patrimonio, rebotó en la barrera y se desvió en la trayectoria hacia portería.
Se crecía en esos momentos el feudo ceutí, aunque otra vez volvió a reaccionar el conjunto de Josan. En el último minuto del primer tiempo, aunque fue a base de paciencia y de circulación como consiguió encontrar los espacios para que Ismael, tras una magnifica asistencia de Pablo del Moral, hiciera el 2-3. Tuvo una más el propio pívot prieguense, aunque su chut lejano de falta lo atajó casi sin problemas Germán.
El paso por vestuarios relajó notablemente el ritmo de partido. Fueron los locales los que salieron de nuevo con más brío, en gran medida por el resultado en contra, aunque el juego fue transcurriendo casi sin peligro en ninguna de las dos áreas. Sería, superados los cinco minutos de la segunda mitad, Lucas Bolo el que imprimiría el empeño ofensivo, con dos potentes disparos casi seguidos, y en ambos casos atajados por el arquero ceutí a base de buenos reflejos.
Lo siguieron intentando los cordobeses, con buenas acciones para Osamanmusa o Saura, pero todas se encontraban, bien con el cuerpo del meta, o directamente se machaban por muy poco. Sin embargo, el escenario ahora cambió, ya que esas oportunidades eran de los cordobeses, pero la pólvora la firmó el Ceuta con un disparo cruzado y ajustado al palo que se coló por bajo en la meta de Cristian. Igualdad y más igualdad en el tramo final del partido, con ambos conjuntos en un hilo en los problemas de faltas y tablas en el luminoso. Hasta que apreció de nuevo Pablo del Moral. Él mismo se la guisó y en solitario generó una acción cuyo disparo cruzado pilló a contrapié al meta y significó el 3-4.
A partir de ahí, los locales pusieron en escena el portero-jugador. Y lo cierto es que el primer aviso fue significativo, aunque el Córdoba Patrimonio se aprovechó de su mayor experiencia con Miguelín, que robó un gran balón el cual acabó en los pies de Lucas Bolo, y fue el argentino el que amplió la diferencia con un disparo lejano a puerta vacía. Incluso habría tiempo para uno más, ya que la presión alta de los locales ofreció espacios que aprovechó el Córdoba Patrimonio, pues una contra liderada por Saura y Pablo del Moral, acabó con un pase magnífico al segundo palo donde apareció de nuevo Bolo para ampliar su registro. 3-6, victoria y a la siguiente ronda de la Copa.
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