Entre el despacho y el césped
Sólo una cara nueva está asegurada. Pero quizá haya alguna más. Eso sí, de haberla es probable que sea en relación al filial y con la mirada en el futuro. Lo cierto es que la curiosidad no va a llevar a los aficionados a la instalación, ya que el comienzo se va a dar a puerta cerrada. Razón: la situación actual en la ciudad con el Covid-19. No existe otro remedio que mantener las máximas cautelas para evitar posibles contagios. Así, el conocimiento de cada novedad se va a producir para los seguidores a través de los medios de comunicación, que no sólo están pendientes -como el entorno del club- a la siempre esperada vuelta al campo. Mucho más esta vez dadas las circunstancias del convulso 2020. Dicho lo cual: el Córdoba, su primer equipo, inicia este miércoles una pretemporada extraña por los muchos factores externos que le rodean. Mientras tanto, Unión Futbolística Cordobesa (UFC) procura la inscripción de la entidad en Segunda B ante la Real Federación Española de Fútbol (RFEF).
Con el punto de partida en el último asunto referido, la sociedad que hoy por hoy está al frente del conjunto blanquiverde mantiene su absoluta confianza en que su proyecto llegue a buen puerto. Todo pese a la incógnita que suscita el hecho que deba proceder a los trámites ante la RFEF sin la tan repetida firmeza jurídica de la venta de la unidad productiva del Córdoba CF SAD. “Lo único que hay es una resolución a nuestro favor”, insistió el máximo representante de UFC, Javier González Calvo, el martes. Lo hizo en una jornada en la que Azaveco, tras consejo de administración de la sociedad original, instó al administrador concursal de la entidad, Francisco Estepa, a la inscripción del club. “Si no inscriben a UFC, Córdoba se quedará sin fútbol de primer nivel”, añadió el mandatario -portavoz que es también de Infinity-.
Hoy por hoy, la única vía, o al menos eso reflejan las palabras de González Calvo, de UFC es precisamente UFC. Es decir, no se baraja la posibilidad de realizar trámites a través del Córdoba CF SAD -con el apoyo de Francisco Estepa con el poder ejecutivo que le otorga el cargo de administrador concursal- ni la compraventa de la sociedad. Y eso que hubo acercamiento entre las partes, un hecho éste al que también se refirió, en cierto modo, el mandatario blanquiverde. “Nosotros hemos hablado con todas las partes interesadas y, a día de hoy, no lo voy a decir rotundamente, pero difícilmente se pueda llegar a ningún tipo de acuerdo”, aseveró en este sentido. De entrada, según ha tenido ocasión de confirmar CORDÓPOLIS, ha habido conversaciones entre el actual órgano gestor de la entidad y Azaveco. Ha sido con los abogados de Carlos González como representantes de su mercantil. Sin embargo, visto lo visto, parece complicado que pueda haber entendimiento en caso de necesitarse.
Pero los aficionados prefieren pensar en otros asuntos. Sobre todo en el balón, que este miércoles vuelve a rodar por fin en la Ciudad Deportiva después de casi cinco meses. El último entrenamiento que acogió la instalación del Camino de Carbonell se dio justo antes de la declaración del estado de alarma, el 14 de marzo, por parte del Gobierno con motivo de la emergencia sanitaria de Covid-19. Entonces ya estaba al frente del primer equipo Juan Sabas, que recibió la confianza de UFC para dirigir a la plantilla la próxima temporada. El reto del cuadro califal es uno y sólo uno, y además de carácter ineludible. Éste no es otro que el ascenso a Segunda A. Para ello el área técnica del Córdoba trabaja desde hace no poco tiempo con el fin de configurar una plantilla lo más competitiva posible. Aunque a estas alturas sólo se ha producido una incorporación. Así es a todos los efectos pues ya se conocen otros nombres que se van a convertir en fichajes.
Dicha contratación es la de Darren Sidoel, que es precisamente la cara nueva de la que se habló al inicio. El neerlandés se encuentra en la ciudad desde el sábado y ya el lunes tuvo oportunidad de empezar a estrechar lazos con algunos de los que van a ser sus compañeros durante la 2020-21. Su presencia en la Ciudad Deportiva es quizá el mayor atractivo de la jornada inaugural de la pretemporada, si bien puede que no esté sólo él como recién llegado. Porque el Córdoba va a tener a prueba a un joven portero belga, Juliaan Laverge, durante dos semanas. Es sobre el césped, y teóricamente a las órdenes de Juan Sabas, donde va a tener que ganarse una plaza en la entidad. En primera instancia para formar parte del filial pero con perspectiva de futuro en relación a la primera plantilla. En definitiva, con todas las salidas que sí ha habido, son 14 los futbolistas más el guardameta los que están llamados en principio a acudir a la cita. A ellos, en teoría, se van a unir jugadores del segundo conjunto. Quizá sea en esa suma en la que también haya novedades.
0