Córdoba CF

La fragilidad defensiva, principal punto a mejorar en el Córdoba CF

Parecía ser una de las principales virtudes de este equipo pero finalmente se ha convertido en una de sus debilidades protagonistas. El Córdoba CF ha comenzado esta temporada en Primera RFEF inmerso en un mar de dudas, más aún después de la derrota frente al San Fernando de este pasado domingo. Es cierto que el juego del equipo, siempre que las condiciones son óptimas, invita a la línea positivista, pero es cierto que hay una serie de factores en la que tiene que crecer conforme las jornadas siguen pasando. De hecho, los chicos dirigidos por Iván Ania ha entrado en una dinámica negativa en cuanto a nivel defensivo se refiere.

En primera instancia, el Córdoba CF conoció el calendario y ya sabía que las tres primeras jornadas era un duro reto al que tenía que estar preparado. El Ibiza llegó en la cita inaugural a El Arcángel y demostró que el fondo de armario es crucial para esta categoría, logrando anotar tres goles que supuso una victoria de oro para el cuadro ibicenco. Esto provocó que la entidad blanquiverde aterrizase en Murcia con la obligación de vencer y lo hizo, pero nuevamente sin tener la portería a cero. Aun así, las sensaciones ya fueron mucho más positiva, aunque se disiparon en cierta parte con la última derrota ante el San Fernando.

En total, los chicos dirigidos por Iván Ania han encajado siete goles en este tramo inicial del campeonato liguero y se han convertido en el equipo más goleado de toda la categoría empatado junto al Atlético Sanluqueño y al Real Murcia, curiosamente. Una cifra muy poco antes vista para un Córdoba CF que está en el camino de igualar los números defensivos de su última etapa en Segunda División. En la temporada 2018-19, la entidad blanquiverde venía con la inercia positiva de su salvación milagrosa la campaña anterior, pero pronto vio que ese suceso fue un auténtico espejismo.

El cuadro blanquiverde, a pesar de que comenzó con un empate a tres ante el Numancia, encajó dos duras derrotas en las jornadas posteriores ante Real Oviedo y Albacete Balompié. En estos tres encuentros, el Córdoba CF había encajado diez goles, mientras que, en los dos siguientes, logró dos porterías a cero. Aun así, esta dinámica acabó siendo una tónica habitual y acabó con el descenso del equipo a Segunda División B. En la actualidad, la entidad califal no parece seguir el mismo camino, pero la necesidad de que esas buenas sensaciones de juego se transformen en resultados es cada vez mayor.