Aina Torres, otra pieza para la medular del Córdoba Femenino

Aunque todavía no existe una sola confirmación las novedades son conocidas casi por completo. De esta forma, viene a confirmarse lo que adelantara hace más de un mes y casi dos el máximo mandatario de la entidad, Javier González Calvo. La plantilla lleva cerrada mucho tiempo, si bien no hay anuncios por, según versión oficial, aprobación desde Baréin -por tema presupuestario, en teoría-. Sea como fuere, el nuevo proyecto del Córdoba para su conjunto femenino está conformado plenamente, y si no casi. Una circunstancia ésta que viene a ratificarse con otra incorporación. Ésta la protagoniza la centrocampista Aina Torres, que llega procedente del Pink Bari de la Serie A de la Liga Italiana Femenina. La futbolista se encuentra en la ciudad y aguarda el comienzo de la pretemporada, al igual que el resto del cuadro califal, tras las pruebas de Covid-19.

En efecto, Aina Torres Pallarès (Barcelona, 1992) es otra pieza para la medular de un equipo que la campaña 2020-21 va a militar de nuevo en Liga Reto Iberdrola, esta vez con Ariel Alfredo Montenegro en el banquillo. Se trata en este caso de una jugadora de gran experiencia en categorías superiores y, sobre todo, en el panorama internacional. Tanto es así que en su hoja de servicios aparece alguna que otra aventura exótica. La centrocampista, de 28 años -pues nació en el mes de febrero, precisamente del año en que su ciudad natal albergó los Juegos Olímpicos-, desarrolló su etapa formativa en los escalafones inferiores del Barcelona. Fue poco después de completar este período cuando, precisamente, vivió un curioso desafío. La mediocentro jugó en Zambia, en concreto en Balueni. Ocurrió el curso 2014-15.

Tras su breve pero a buen seguro intenso periplo en África, Aina Torres firmó con el otro club de su ciudad natal. Es decir, vistió la elástica del Espanyol. Lo hizo durante la campaña 2015-16, tras la cual se enroló en un equipo muy conocido por el Córdoba Femenino. Se trata del Santa Teresa de Badajoz, con el que compitió en la segunda categoría española -antes Segunda y desde el pasado ejercicio Reto Iberdrola-. No le fue mal a su paso por tierras extremeñas, sin embargo cambió drásticamente de aires en 2018, cuando fichó por el Houston Ace de Estados Unidos. Con todo, dicho curso lo finalizó en el Soyaux de la Division 1 de la Liga Francesa Femenina. De la elite gala pasó después a la elite italiana al incorporarse, como quedó escrito, al Pink Bari. Con esta última escuadra disputó 15 encuentros el campeonato 2019-20.

La contratación de la barcelonesa es la octava conocida para el conjunto femenino de cara a la temporada 2020-21, en la que el objetivo es tratar de aspirar al ascenso a Liga Iberdrola -máxima categoría-. Con anterioridad, CORDÓPOLIS informó de hasta seis fichajes. Son los de las delanteras Belén Potassa -internacional por Argentina-, Ali Muñoz y Nati de Francisco -o Natalia Gómez-, la central Hitomi Tanaka, la lateral, también de Argentina, Sofía Schell y la mediocentro francesa Candice Goujon. Schell, por cierto, está a la espera de trámites burocráticos para confirmar su incorporación. A todas ellas, y a la mencionada Aina Torres, hay que sumar a la alemana, otra pieza en la línea de medios, Lisa Marie Scholz, cuyo nombre aportó El Día de Córdoba.

Dichos fichajes forman parte de una serie de 11, que son los que, al menos sobre el papel, van a completar una plantilla que abandonaron jugadoras relevantes como Mery Martí, Kerlly Real -ambas bajas adelantadas por este periódico- o Minori Chiba. Por cierto, que todas las futbolistas se encuentran en la ciudad desde días atrás -unas desde hace más y otras menos-. De hecho, todas las componentes del cuadro califal completaron los pertinentes reconocimientos médicos, que esta vez, como es lógico, incluyeron las pruebas de Covid-19. Una vez resueltas las citas clínicas, el Córdoba Femenino tiene fijado el inicio de su pretemporada el próximo lunes en la Ciudad Deportiva. Es entonces cuando un renovadísimo equipo se va a poner a las órdenes de Ariel Alfredo Montenegro, que tomó las riendas después de la repentina salida del técnico Manu Agudo.