Unos 60 técnicos superiores cordobeses se unen a la demanda colectiva contra el SAS
Unos 60 técnicos superiores de Córdoba se han sumado a una demanda colectiva contra el Servicio Andaluz de Salud (SAS), uniéndose a un movimiento regional que ya cuenta con casi 600 profesionales de toda Andalucía. El grupo busca visibilizar y denunciar lo que consideran graves irregularidades en los procedimientos de contratación y gestión del personal estatutario temporal.
La demanda, encabezada por técnicos de laboratorio, radiodiagnóstico, anatomía patológica, y otras especialidades, señala que el SAS infringe de manera sistemática las normativas vigentes, como el Estatuto Básico del Empleado Público y el Pacto de la Mesa Sectorial de Sanidad. Estas vulneraciones, sostienen los denunciantes, han provocado una precarización continua en sus condiciones laborales, afectando no solo a los trabajadores, sino también a la calidad de los servicios sanitarios que se prestan a los ciudadanos andaluces.
Entre las principales reclamaciones, los técnicos exigen que la Administración respete los procedimientos de contratación, evitando el uso abusivo de contratos de interinidad y sustitución sin justificación. Denuncian además casos en los que se ha anulado nombramientos una vez iniciada la prestación de servicios o situaciones donde el personal ha trabajado sin estar dado de alta en la Seguridad Social, lo que les ha dejado en una situación de desamparo jurídico.
“La salud de los ciudadanos no puede quedar supeditada a los intereses de gestión que precarizan el empleo de los técnicos”, afirman desde el colectivo, resaltando que la calidad del sistema sanitario depende directamente de las condiciones laborales de quienes lo sostienen.
Además de las irregularidades en los contratos, los técnicos critican la opacidad en el proceso de selección del personal temporal. Según denuncian, el SAS no ha actualizado las listas de personal estatutario temporal, incumpliendo su obligación de hacerlo anualmente, lo que ha generado incertidumbre y una total falta de transparencia en los llamamientos.
La demanda también ha sido apoyada por colectivos de otras provincias andaluzas, que coinciden en señalar que la situación actual forma parte de una tendencia más amplia del Gobierno andaluz hacia el desmantelamiento progresivo del sistema sanitario público. “Cuando el SAS precariza a los técnicos, toda la ciudadanía se ve afectada, ya que sin nuestros cuidados, la salud pública tampoco estará garantizada”, afirman.
Los técnicos han llevado sus quejas a diversas instancias, incluyendo la Oficina Andaluza contra el Fraude y la Corrupción y el Defensor del Pueblo Andaluz, y han solicitado la intervención de la Comisión Central de Control y Seguimiento del Pacto de la Mesa Sectorial de Sanidad para garantizar que se cumplan sus derechos.
Este movimiento colectivo busca no solo poner fin a su situación de precariedad, sino también sensibilizar a la sociedad sobre la importancia de tener un sistema sanitario público que garantice tanto los derechos de los trabajadores como la calidad de los servicios. Para los técnicos, esta lucha no es solo por sus condiciones laborales, sino por la defensa de un servicio público esencial para la ciudadanía.
En Córdoba, se espera que el apoyo al movimiento crezca en las próximas semanas, a medida que más técnicos se unan a la causa, conscientes de la necesidad de una mayor estabilidad y transparencia en el sistema sanitario andaluz.
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