Los cordobeses llevan desde el 4 de julio respirando altos valores de ozono

El verano no es una buena época para la calidad del aire en Córdoba. La intensidad del sol y las altas temperaturas suelen disparar las concentraciones de ozono troposférico en el Valle del Guadalquivir. Este contaminante, muy perjudicial para la salud, se dispara con las partículas procedentes de la combustión de los motores de los vehículos.

El verano de 2022 está siendo especialmente perjudicial para la calidad del aire en la ciudad de Córdoba. Tanto que desde el 4 de julio, la calidad conjunta del aire en las tres estaciones de medición de la ciudad de Córdoba (Asomadilla, Al Nassir y Lepanto) se considera “regular” a causa precisamente del ozono troposférico. Desde entonces y hasta este mismo fin de semana, cuando el contaminante principal han sido las partículas en suspensión de la calima, no ha mejorado la calidad del aire en la ciudad de Córdoba.

Los niveles de ozono alcanzan, de media, los 80 microgramos en la ciudad de Córdoba desde el 4 de julio. Pero han sido especialmente altos, con niveles de calidad del aire “desfavorable” entre el 13 y el 16 de julio, y entre el 23 y el 25 del mismo mes. Coincide con el periodo de altas temperaturas en la ciudad, cuando se llegaron a superar los 44 ºC de máxima.

Pero desde el 12 de agosto la ciudad ha vivido otro episodio de contaminación preocupante. Ese día, la calima se apoderó del cielo de la ciudad, registrando valores “desfavorables” primero en las estaciones de Al Nassir y Lepanto, y ya desde el 12 de agosto también en la Asomadilla. Incluso las tormentas del 12 y el 13 no llegaron a disipar la calima. Al contrario, el viento hizo aún más irrespirable el aire de la ciudad. Eso sí, descendió de manera notable la concentración de ozono troposférico.

A pesar de los altos niveles de concentración de partículas en el aire respirado no se ha activado ningún tipo de protocolo especial en la ciudad. El Ayuntamiento ya dispone de un documento marco para un Plan sobre la Calidad del Aire. Pero de momento no se contemplan medidas extraordinarias cuando la contaminación es alta.

Los efectos del ozono troposférico

Los efectos adversos sobre la salud de este contaminante se manifiestan como irritación en los ojos, superficies mucosas y pulmones y se relaciona con inflamaciones de las vías respiratorias, morbilidad y mortalidad y nacimientos prematuros, afectando fundamentalmente a personas con dificultades respiratorias, afectadas de asma, personas mayores y población infantil.

Las principales vías de actuación para reducir la contaminación del aire pasan por la reducción del tráfico motorizado disminuyendo la necesidad de movilidad con un urbanismo de proximidad y potenciando el transporte público y los medios no motorizados como la bicicleta o el tránsito peatonal; la reconversión ecológica del transporte interurbano desde la carretera a un ferrocarril convencional mejorado y socialmente accesible; el ahorro y la eficiencia energética; la recuperación de los estímulos para la generación eléctrica renovable, etc.

El Ayuntamiento de Córdoba no dispone de un plan actualizado para el control del ozono en la ciudad. Cuando se superan los umbrales no se activa una orden que limita el tráfico en la ciudad, por ejemplo.

El ozono troposférico, también conocido como ozono “malo” por contraposición al de la estratosfera, es un contaminante secundario producido por la reacción entre la luz solar y el dióxido de nitrógeno y los hidrocarburos emitidos por los automóviles y algunas industrias.

Por inhalación, provoca un incremento del riesgo de enfermedades respiratorias agudas y reducción de la función pulmonar, así como el agravamiento de patologías cardiovasculares. La Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA) estima entre 1.500 y 1.800 las muertes prematuras anuales en España producidas como consecuencia de la exposición a niveles de ozono como los registrados estos días. El ozono, además de para las personas, también es tóxico para la vegetación, dañando los bosques y reduciendo la productividad de los cultivos.