El Ayuntamiento de Córdoba pierde o cesa a seis altos cargos en ocho meses
Una mayoría absoluta no necesariamente es equivalente a un gobierno tranquilo. La prueba de ello está siendo el arranque de la legislatura en el Ayuntamiento de Córdoba, donde el Gobierno del PP de José María Bellido, acaba de recibir una carta de renuncia (o de cese forzado) de un alto cargo, en la que constituye la sexta salida del organigrama de alta dirección en apenas ocho meses de Gobierno (contando agosto, que es un mes inhábil).
La salida o el cese de Rafael Clavero de la Coordinación General de Turismo, además, ha sido la segunda que escenifica públicamente una ruptura entre altos cargos y los concejales delegados de Área en apenas una semana. Clavero se ha marchado, según ha adelantado Cordópolis este viernes, con duros reproches al concejal de Turismo y presidente del Imtur, Daniel García Ibarrola.
Un concejal cuyo gabinete de prensa no ha querido hacer declaraciones a este periódico, aunque fuentes del Gobierno Municipal han asegurado a Diario Córdoba que la salida de Clavero ha sido un cese decidido por García Ibarrola, un concejal una apuesta personal del alcalde cuando confeccionó las listas, y que, antes de llegar a la política, era director de Relaciones Institucionales de El Corte Inglés en Córdoba. A última hora de la tarde, el Gobierno filtró el nombre de su sustituto, Arístides Bermejo, y explicó que la salida de Clavero estaba relacionada con el recambio.
Sea como sea, la marcha del coordinador general de Turismo se ha producido apenas una semana después de que la concejala de Cultura, Isabel Albás, cesara de manera fulminante al gerente del Instituto Municipal de Artes Escénicas (IMAE), Carlos Aladro, escogido solo cinco meses antes por concurso público, con el que había protagonizado encontronazos públicos, y cuya salida puede acabar en un más que probable litigio.
Prácticamente un mes antes, en enero, fue el gerente de Mercacórdoba, Jesús Reina, el que dejó su puesto, en el que llevaba desde el año 2015. Su salida fue respondida con un comunicado de los trabajadores respaldando su labor, mientras el Ayuntamiento defendía en un comunicado que, “con esta propuesta de cese”, pretendía “mejorar la coordinación entre los objetivos estratégicos del gobierno local y la gerencia de la empresa MercaCórdoba en esta etapa”.
Igual de inesperada fue la salida del gerente de la empresa Saneamientos de Córdoba (Sadeco), Francisco Ruiz, que lo anunció en diciembre de 2023. Oficialmente, adujo motivos “estrictamente laborales”, y le sustituyó el coordinador general del Ayuntamiento, Ramón Díaz Castellanos.
Ese mismo mes se comunicó la marcha de Daniel Broncano de la Gerencia del Consorcio Orquesta de Córdoba. También oficialmente se trató de un cambio de destino por una oportunidad laboral, si bien fuentes internas explicaron que no hubo sintonía entre los músicos y el gerente, que no hizo tampoco declaraciones al respecto. Su puesto ha sido ocupado recientemente por Roberto Pálmer.
Y dos meses antes, en octubre de 2023, fue Gonzalo Esparza, gerente del Instituto Municipal de Desarrollo Económico y Empleo (Imdeec), el que se marchó a la Diputación, concretamente al Instituto Provincial de Desarrollo Económico (Iprodeco). Su puesto lo ha ocupado María Luisa Gómez Calero, la única concejala de Ciudadanos del anterior mandato que no había repescado el alcalde para el actual.
Y todos estos ceses han coincidido en el tiempo con la tramitación, vía Presupuesto Municipal, del incremento salarial entre los cargos electos, los funcionarios de alto rango y el personal de confianza del equipo de gobierno. Un aumento, que el portavoz del Gobierno, Miguel Ángel Torrico, defendió como una medida necesaria “para traer los mejores para que gestionen mejor”.
Desde que pronunció aquellas palabras, tres altos cargos han abandonado su trabajo para el ayuntamiento, renunciando (o forzados a dejar de cobrar) salarios que, en ningún caso, bajan de los 65.000 euros al año, según la última subida aprobada por el Ayuntamiento.
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