Nace la Federación de vecinos de Cascos Históricos de Andalucía

Durante los días 26 y 27 de noviembre se ha celebrado en Jerez de la Frontera el II Encuentro de asociaciones vecinales de los centros históricos de Andalucía, durante el cual se ha llevado a cabo la asamblea constituyente de la nueva Federación que representa la especificidad de los centros históricos y las especiales condiciones de vida y problemas, comunes en todas las localidades, que sus habitantes soportan cotidianamente. Un total de 14 asociaciones han participado de dicha asamblea constituyente. Entre los fundadores se encuentra la asociación de vecinos de La Axerquía y la de Regina Magdalena (Córdoba). Esta Federación tiene tres objetivos prioritarios.

“El primero es oponernos por todos los medios al nuevo proyecto de Orden de la Junta de Andalucía que pretende derogar la del 25 de marzo de 2002 para imponer, entre otras cosas, una nueva regulación del horario de apertura y cierre de los establecimientos públicos en la Comunidad Autónoma de Andalucía y esto, principalmente, pensando en los establecimientos de hostelería que estén situados en un Municipio Turístico o en zonas declaradas de Gran Afluencia Turística con el objetivo de eliminar trabas administrativas y

facilitar la actividad empresarial“, señala una nota de prensa.

El segundo pasa por exigir a la Junta de Andalucía (Presidenta y al Consejero de Justicia e interior) que les incluya como interlocutores en la mesa que pretende modificar la orden antes mencionada. “Nos resulta inexplicable que en la discusión de un tema como este, estén ausentes los vecinos y vecinas de los cascos Históricos y monumentales de las localidades andaluzas”, indican. “La Junta de Andalucía dice que han sido oídos los vecinos para la nueva regulación, esto no es cierto, en la mesa donde supuestamente se ha negociado y elaborado el decreto no había ninguna representación del vecindario ni de los cascos históricos, ni de ciudades patrimonio de la humanidad, ni de ningún otro lugar; sí está en la mesa una tal asociación o federación de amas de casa que es desconocida y que no tiene ninguna representatividad para el caso que nos ocupa”, añaden.

Y el tercer objetivo es reivindicar, en todo momento, para los habitantes de los cascos históricos, “unas condiciones de vida óptimas, en las que ante todo se respeten sus derechos fundamentales (al descanso y al uso proporcional y compartido de la calle)

y el mantenimiento de la vida vecinal como garantía de la supervivencia de los centros históricos“. Ello supone ”defender los cascos históricos pasa por defender a sus habitantes y el mantenimiento de los vínculos sociales con el territorio“.

Para la nueva federación, “el punto de vista de la Junta de Andalucía es primar sobre todo la proliferación del turismo afirmando que esto creará miles de puestos de trabajo; afirmación muy discutible y si se da el caso, con condiciones laborales de una precariedad inadmisible”. La otra cara de la moneda, subrayan, “es la destrucción del tejido social y el patrimonio antropológico, el impacto ambiental (contaminación acústica, masificación, suciedad, deterioro urbano…). Estos costes habría que contemplarlos en el balance final, pero no: prima el beneficio a corto plazo, la racionalidad mercantil y crematística donde los costes ambientales no se consideran”.

En este sentido, se reafirman en que “estamos en contra de la destrucción de la manera de vivir en las barriadas del casco histórico, sus comercios, sus lugares de reunión, su idiosincrasia… La destrucción de la vida vecinal es patente ya en zonas del barrio antiguo de Córdoba y de otras ciudades: ruido, invasión del espacio público, proliferación de hoteles y apartamentos turísticos en detrimento de viviendas residenciales, despoblación”.

“Defender los cascos históricos pasa por defender a sus habitantes y el mantenimiento de los vínculos sociales con el territorio”, argumentan. “Queremos denunciar las agresiones e intimidaciones

que ya se están produciendo en algunas ciudades (Málaga) a representantes de asociaciones de vecinos de los cascos históricos y que han tenido que denunciar en los juzgados“, ponen como ejemplo.

“Nos uniremos con otros colectivos nacionales y europeos para defender nuestros barrios históricos que son patrimonio de toda la ciudad. Si tenemos que llegar a los tribunales para denunciar la dejación de funciones de las autoridades en la conservación de nuestro patrimonio antropológico, social, urbano y monumental lo haremos”, advierten para acabar.