Ganemos e IU instan al PSOE a definirse sobre el laicismo municipal

La agrupación de electores y el socio de gobierno de los socialistas llevan al Pleno una moción para el impulso del carácter laico y aconfesional del Ayuntamiento

¿Se va a abrir una caja de Pandora? Ganemos e IU van a llevar al Pleno del próximo viernes una moción para el impulso del carácter laico y confesional del Ayuntamiento. Con esta medida, la agrupación de electores y el socio de gobierno de los socialistas van a instar al PSOE a decidir sobre el carácter laico de la administración municipal. Una cuestión que el portavoz de Ganemos, Alberto de los Ríos, reconoce que es “polémica”.

De aprobarse y desarrollarse esta moción, que forma parte de los puntos acordados en el pacto de investidura que apoyó Ganemos, “los miembros de la Corporación Local y el personal al servicio de la administración municipal no participarán en función de su cargo en manifestaciones religiosas”, señala el punto D de la moción.

Precisamente, este es uno de los aspectos por los que Ganemos y los socios de gobierno de Isabel Ambrosio han “dudado” de que este punto del acuerdo de investidura se esté cumpliendo, reconoce Alberto de los Ríos. “La presencia de la alcaldesa en algunos actos religiosos no ha llevado a pensar”, señala.

De los Ríos afirma que todavía no sabe cuál va a ser la postura que adopte el PSOE en el pleno pero reconoce que puede ser un punto polémico para este partido. “Insistimos en que no es una moción contra nadie sino a favor de la diversidad y la libertad de conciencia”, añade. Además, el concejal de Ganemos insiste en que la moción está basada en textos similares redactados por el PSOE en comunidades como Asturias o Castilla León.

El acuerdo señala que no se promoverá por parte del Ayuntamiento “ritos ni celebraciones religiosas de ningún tipo, siendo todos los actos organizados por el Ayuntamiento de Córdoba exclusivamente de carácter civil”. De la misma forma, el Consistorio “no donará ni facilitará suelo público ni local ni concederá financiación pública o exenciones fiscales para infraestructuras o actos de ninguna confesión religiosa.

En cuanto a las inmatriculaciones, se insta a elaborar un censo de las propiedades rústicas y urbanas adquiridas por instituciones religiosas desde 1966.