Detenido por guardar un lanzagranadas, una ametralladora y la réplica de un AK-47
En su casa de La Carlota se encontraron piezas fundamentales de armas de fuego, tales como cañones y conjuntos de cierre, cargadores, dos bayonetas y numerosos cartuchos | Se le imputa un delito de tráfico de armas, otro de tenencia de armas prohibidas y otro de depósito de municiones
La Guardia Civil en una operación desarrollada en La Carlota, por el Grupo de Información de la Comandancia de la Guardia Civil de Córdoba, ha detenido a una persona como supuesta autora de un delito de tráfico de armas, otro de tenencia de armas prohibidas y otro de depósito de municiones. Las investigaciones se iniciaron el pasado mes de enero, tras detectarse a través de varias páginas de Internet, numerosos anuncios en los que se ponían a la venta y se compraban armas supuestamente automáticas, actividades prohibidas por la normativa española a particulares.
En el principio de la investigación, se pudo averiguar que una persona, que utilizaba varios seudónimos para no ser identificado, mantenía una gran actividad en la red, concretamente en páginas de compra-venta de armas y efectos militares. Asimismo, se pudo saber que el mismo había efectuado ventas y compras de armas y piezas fundamentales tanto en España como en Europa y Estados Unidos.
El avance de la investigación, permitió identificar plenamente al supuesto autor de las compra-ventas, que resultó ser un vecino de La Carlota de 26 años. Las pesquisas llevaron a sospechar que esta persona pudiera estar adquiriendo armas inutilizadas que manipulaba hasta hacerlas perfectamente utilizables y venderlas para obtener un beneficio económico.
En el registro de su vivienda se encontró un lanzagranadas y una ametralladora antiguas, de mediados del siglo pasado, que pudieran estar en proceso de rehabilitación, así como un rifle replica del AK-47 que podría estar modificado, y algunas piezas fundamentales de armas de fuego, tales como cañones y conjuntos de cierre, cargadores, dos bayonetas y numerosos cartuchos para alimentar las armas, junto a varios equipos informáticos que fueron intervenidos.
Ante estos hallazgos, se procedió a la detención del sospechoso. La Guardia Civil considera que ha evitado que algunas armas pudieran haber sido introducidas en el mercado ilegal. La investigación y análisis de las armas encontradas sigue abierta para determinar su estado de funcionamiento.
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