Crecí en los 70 bajo la influencia de la Señorita Pepis, un set de maquillaje para niñas del que arranca un amor interminable por el rojo de labios y el khol enmarcando la mirada. Las tendencias y la moda, la cosmética y el sublime arte del perfume me interesan con una pasión que solamente los adictos sabemos reconocer. Y sí, somos cientos de miles de personas -por cierto, muy distintas en edad y características sociales- para quienes la moda es una motivación, un bálsamo, un acicate, un exquisito pasatiempo. Ahora que Internet y las redes sociales han incendiado el mundo con la revolución fashionista, por qué no echar más leña al fuego desde las páginas de CORDÓPOLIS.
Linofilia
Existe la predilección por las prendas de lino: gentes que cada verano visten la camisa, el caftán o las bermudas de la fibra natural más fresca de la tierra. ¿Fresca?, ¿dónde hay algo de lino, que me lo llevo puesto? Pues sí, la emergencia climática (que hay que parar como sea) agranda todas sus virtudes, para mayor auge de la linofilia.
La suerte es que en 2022 las colecciones de moda asequible y marcas cada vez más comprometidas con la sostenibilidad apuestan por el lino y en sus diseños en este material exhiben color, cut out, escotes halter, aires étnicos y bohemios y estampados, además del clásico menú en blanco y tonos naturales.
El lino textil, derivado de la planta Linum usitatissimum, no tiene rival en la absorción de la humedad y su evaporación y, por ello, es sinónimo de frescura y confort en verano. Hace 7.000 años ya se tejía el lino en la actual Turquía y las momias egipcias se envolvían con esta noble fibra universal; hoy, su cultivo, industria y artesanía están presentes en distintos puntos del planeta, también en España y el resto de Europa.
Lo lógico, por tanto, es que tengamos a nuestro alcance prendas en 100% lino y que la combinación de lino y algodón, incluso con parte de viscosa o lycra, vaya siendo cada vez más habitual en los percheros de las tiendas, así como en complementos, decoración y ropa de cama de firmas como LinenMe.
Zara, por ejemplo, ha lanzado las colecciones ‘Lino’ para mujer y hombre; en la femenina podemos encontrar tops y pantalones palazzo, camisas, vestidos túnica, caftanes, pantalones pareo, así como prendas más estructuradas que si no son lino al 100%, sí lo llevan en su composición aportando ese toque de durabilidad, tacto natural y confort; y en la masculina sobresalen camisas estampadas, de rayas, chaquetas y bermudas.
A un precio más elevado, pero no astronómico, Reformation incluye en sus colecciones prendas 100% lino, de la misma manera que COS, con una oferta específica.
Una buena prenda de lino será preferida e indispensable, durará y será la más viajera en la maleta de las vacaciones.
Nota: Las menciones a marcas y productos no llevan aparejada ninguna contraprestación
Sobre este blog
Crecí en los 70 bajo la influencia de la Señorita Pepis, un set de maquillaje para niñas del que arranca un amor interminable por el rojo de labios y el khol enmarcando la mirada. Las tendencias y la moda, la cosmética y el sublime arte del perfume me interesan con una pasión que solamente los adictos sabemos reconocer. Y sí, somos cientos de miles de personas -por cierto, muy distintas en edad y características sociales- para quienes la moda es una motivación, un bálsamo, un acicate, un exquisito pasatiempo. Ahora que Internet y las redes sociales han incendiado el mundo con la revolución fashionista, por qué no echar más leña al fuego desde las páginas de CORDÓPOLIS.
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