Cuando alguien te diga que jugó al fútbol desde pequeño...
La Liga Provincial Bebé, para niños de 4 y 5 años, se ha convertido en una de las atracciones en los fines de semana
Arrancó hace apenas un par de semanas y se ha convertido en uno de los acontecimientos más singulares en el fin de semana deportivo. La Liga Provincial Bebé cuenta con nueve equipos compuestos por niños y niñas de 4-5 años, que toman su primer contacto con la competición de un modo peculiar. Los resultados, por pura lógica, son lo de menos en un campeonato concebido para la diversión de los chavales. Todo consiste en aprender con una sonrisa, en introducirse en el fútbol de una manera limpia y lejos de las crispaciones que se detectan, lamentablemente, en las divisiones superiores. No muy tarde, por desgracia, pues en los recintos deportivos se producen situaciones que tienen poco que ver con la educación y el fomento de los valores que siempre han de estar presentes a estas tempranas edades.
La Federación Cordobesa ha lanzado este campeonato con siete equipos de la capital (CD Los Califas, Séneca CF, AD El Naranjo, CD Alcázar, Parque Cruz Conde, AD Apademar y CD La Ribera del Guadalquivir) y dos de la provincia (CD Atlético Menciano y Villarrubia CF). Muchos nombres históricos en la lista. De las escuelas de fútbol germinarán los futbolistas que nutrirán los escalafones superiores en el futuro. Inician su carrera desde muy temprano. Algunos dan sus primeras patadas al balón al poco tiempo de haber empezado a andar. Prácticamente todos proceden de familias en las que el deporte, y en concreto el fútbol, es una actividad con raíces profundas. Si en el hogar hay balones y pasión por el fútbol, no resulta extraño que cada fin de semana comience una romería balompédica por todos los escenarios de la provincia.
La Liga Bebé sirve como puerta de entrada de los niños al mundo del fútbol, pero también para los padres que acompañarán, durante esos años y los venideros, la trayectoria deportiva de los chavales durante su etapa de formación. ¿Qué papel juegan? Sin lugar a dudas, básico. Superior al que puedan tener los entrenadores sobre sus chicos. Más que aspectos técnicos o tácticos, este campeonato tiene como gran desafío el modelar una mentalidad positiva y sana en todos los que intervienen tanto dentro como fuera del campo. Si al finalizar un partido los niños se van con una sonrisa compartida con los padres, este campeonato habrá cobrado gran parte de su sentido.
0