Xisco, una nueva aventura con inicio en Las Palmas

El balear debutó con el Mallorca, donde está cedido, en el lugar en que tocó la gloria con el Córdoba | De los otros descartados blanquiverdes, ninguno jugó y dos están sin equipo

En Las Palmas tenía que ser. Dos meses y nueve días después de aquel inolvidable en Córdoba 22 de junio, debutó con la elástica de su nuevo equipo. El destino lo quiso así y Xisco se estrenó con la camiseta del Mallorca -en todos los sentidos, pues jamás jugó en el cuadro bermellón- en el mismo lugar en que aquella noche celebrara el histórico ascenso blanquiverde a Primera. El delantero disputó su primer partido con el conjunto balear en el Insular, donde a diferencia del choque en el que festejó el salto de categoría califal participó de principio a fin con los de Karpin. El punta, que salió de El Arcángel en el recientemente finalizado mercado invernal en calidad de cedido con rumbo a su tierra, inició de este modo otra etapa en su trayectoria en una plaza que, en modo alguno, guardaba un sabor especial para él. Llegó y obtuvo la titularidad, si bien no consiguió marcar y tampoco sumar por vez primera con los mallorquinistas, que cedieron ante los canarios (2-1).

Sea como fuere, el balear puede narrar un buen comienzo de andadura en el conjunto bermellón, ya que al menos gozó de la confianza de su nuevo técnico y completó los 90 minutos -algo más con el descuento, ya se sabe- del duelo que enfrentó a dos de los rivales que a principios de temporada se suponían directos y que ahora no lo son tanto. El delantero abandonó finalmente la disciplina del Córdoba, aunque sólo para lo que resta de campaña y a modo de préstamo, justo antes de que el Real Madrid regresara a la ciudad. En Mallorca tratará de encontrar la continuidad que no logró tener en el cuadro blanquiverde en su retronó a la elite y de volver a marcar goles que en la primera vuelta del curso echaron en falta los califales. En efecto, Xisco jugó con el que hasta el final de campeonato será su equipo. Es algo que no pueden decir los demás descartados de la entidad cordobesista, que siguen sin tener fortuna lejos de la ribera del Guadalquivir.

En ese sentido, hay que diferenciar la situación de Carlos Caballero, que salió cedido al Veria griego -donde se reencontrará con Raúl Bravo- el último día del mercado de invierno. El madrileño, de hecho, protagonizó el último movimiento del Córdoba en ese período de altas y bajas, por lo que es lógico que no pudiera ser de la partida en su nuevo equipo este fin de semana. Quien sí cambió de rumbo con más tiempo como para haber podido jugar es Ryder Matos, que entró en la lista de convocados del Palmeiras para su duelo con el Osaco Audax -vencieron los primeros por 1-3-, pero no sumó un solo minuto. Le tocará esperar para vestir la elástica del conjunto brasileño. Como también parece que tendrán que esperar para reaparecer sobre el césped los otros dos futbolistas que abandonaron el Córdoba entre diciembre y enero. El primero que tomó la puerta de salida fue Havenaar, que continúa sin equipo a pesar de que interesó y mucho al Feyenord. El delantero no encuentra destino, como tampoco Aritz López Garai. El vasco continúa como agente libre después de cerrar su desvinculación con el club califal la pasada semana.