El Deza Box 77 regresa con un podio en el Nacional de Superbike
Las balas verdes del Deza Box 77 Racing Team cierran positivamente su retorno a los circuitos, que tuviera lugar el fin de semana. El conjunto cordobés disfruta, además y por ende, de un buen regreso al Campeonato de España de Superbike (ESBK). Sobre todo de la mano de Pepe Osuna, que logra la primera victoria de la temporada en el Nacional júnior. Más allá de ese sobresaliente resultado, la escuadra concluye su paso por Navarra, donde volviera a la pista, con actuaciones destacadas.
Sin duda, el mejor resultado del Deza Box 77 en esta ocasión es el logrado por Pepe Osuna, que vivió un fin de semana de ensueño. El ecijano ganó su primera carrera en el Nacional y lo hizo con vuelta rápida incluida y con récord del circuito. En una prueba muy inteligente, se mantuvo en cabeza en las primeras vueltas y cuando creyó que tenía más ritmo se puso a tirar para romper el grupo. Una vez cogió la cabeza, no la soltó. Cruzó la línea de meta en primera posición. El domingo volvió a dominar para situarse entre los mejor clasificados cuando el grupo se estiraba, pero un pequeño toque en la última vuelta le hizo quedar tercero. Osuna se aúpa a la quinta plaza en la general y tercero en Ninja Spirit.
El catalán Guillem Erill salvó un fin de semana muy complicado para él, ya que ésta es la pista más difícil para su Kawasaki. Fue de menos a más después de una caída en el cronometrado que le penalizó en las dos carreras disputadas. En la primera tuvo la capacidad de salvar tres puntos con la decimotercera posición. En la segunda, tras unos cambios de suspensiones, pudo mejorar sus sensaciones y coger un punto más con el decimosegundo lugar. Con estos resultados asciende una plaza en la general y mantiene intacto el objetivo de quedar entre los cinco mejores.
Por otro lado, el debutante Bruno Baños no pudo comenzar mejor su andadura en el Campeonato de España de Superbike. Durante todo el fin de semana tuvo una línea ascendente que le permitió rodar cerca de los tiempos de cabeza, todo a pesar de no conocer la pista y de los nervios propios del debut. Terminó la primera carrera con una decimonovena plaza en la general y décima entre las Kawasaki. Un problema técnico, cuando mejoraba sus posiciones, le hizo pasar por boxes en la segunda, lo que evitó que pudiera redondear su fin de semana.
Mientras, Antonio Torres retomó la competición tras su lesión en Montmeló. Comenzó con probatura de su estado físico en los entrenamientos libres. Sintió molestias en los mismos aun cuando podía pilotar. En los cronos no pudo conseguir una vuelta buena y salió muy atrás, en vigésimo lugar. En la primera magna protagonizó una machada y se colocó en el grupo de cabeza. Después bajó el ritmo, pero logró la quinta plaza. En la segunda, ya en quinta posición en la salida, supo mantenerse entre los mejores de la competición, si bien a mitad de carrera no estuvo a rebufo del grupo. Pero tras unas grandes últimas vueltas contactó a los pilotos que le precedían y rozó el podio de la general. Acabó tercero entre las Kawasaki.
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