El Movistar Inter recuerda un deber pendiente

El gol es su obsesión. La mantiene desde tiempo atrás en el aspecto anotador. Hablan los números en este sentido y le dan la razón. Con 39 a favor, sólo dos conjuntos ven menos puerta. Son el colista y el penúltimo: esto es Aspil Jumpers Ribera Navarra, con 35, y el Pescados Rubén Burela, con 30. Aunque el cuadro gallego tiene aún un duelo menos. Por tanto, está claro que el Córdoba Patrimonio de la Humanidad necesita dar con el balón en las redes de las porterías rivales muchas más veces. Sin embargo, el tanto no ha de preocuparle menos en este sentido como en el contrario, es decir, en lo que al bagaje defensivo se refiere. No en vano, las cifras también arrojan un dato muy significativo en este apartado. El conjunto blanquiverde es el segundo con más dianas en contra de Primera tras sufrir su peor derrota ante el Movistar Inter (7-1).

Precisamente la goleada infligida por el líder de la mejor liga del mundo permite ahora recordar un deber que tiene pendiente el cuadro califal. Éste no es otro que la mejora en las prestaciones en labores defensivas. Y rememora porque la realidad actual no es novedosa. Desde hace un buen puñado de jornadas el equipo de Maca está ocupa un lugar en la zona baja de la tabla en relación a goles en contra. Sin ir más lejos, cerró la primera vuelta en una situación muy parecida a la presente. Superada la decimoquinta fecha del campeonato el Córdoba Patrimonio de la Humanidad había encajado tantas dianas que sólo un rival le superaba de manera negativa. Entonces los blanquiverdes habían recibido 53 tantos y el Industrias Santa Coloma la friolera de 57. Después del último fin de semana los catalanes llegan a los 70 y los cordobeses a los 68, cifra que iguala el Fútbol Emotion Zaragoza.

De esta forma, el gol tiene que ser foco de atención del conjunto blanquiverde no sólo en el plano anotador, para lo que se reforzó en el mercado de invierno. Sobre todo con el nipón Kazuya Shimizu, que aún no pudo debutar por culpa de molestias físicas. Ha de ser motivo de trabajo también en materia defensiva, en la que ya quedó descrita la situación por la que atraviesan los de Maca. El total de dianas en contra es resultado de una estadística que quizá salte menos a la vista en la vorágine competitiva dentro de la considerada mejor liga del mundo. El Córdoba Patrimonio de la Humanidad selló nada más y nada menos que 14 jornadas de las 18 disputadas hasta ahora con tres o más tantos recibidos. En los cuatro restantes, sólo estuvo sin recibir en uno -que fue, curiosamente, el inaugural-.

La trayectoria en este sentido sirve para aclarar lo que también supone la pérdida de puntos en no pocos partidos, en unos casos dos y en otros al menos uno. De vuelta a los números, el cuadro califal encajó sólo un gol en un partido y dos en otros tantos. La problemática comienza al repasar los duelos en que los rivales fueron capaces de batir la meta blanquiverde en tres ocasiones. Fueron cuatro, que aun así están muy lejos de la decena de choques en que la cifra de dianas resultó superior. En diez jornadas, el Córdoba Patrimonio de la Humanidad recibió más de tres tantos, con el peor registro conocido en la última disputada. La visita al Movistar Inter deparó el mayor guarismo negativo y significó la más dura derrota de la temporada (7-1). El Barça y el Jimbee Cartagena consiguieron hacerle seis el Barça y el Jimbee Cartagena.

Con todo, lo cierto es que el asunto fue a peor en lo poco que va de segunda vuelta. En las tres primeras jornadas de este tramo liguero el conjunto blanquiverde encajó 15 goles, que son exactamente el triple de los que recibió en sus tres primeros partidos en la máxima categoría del fútbol sala español. La situación actual es, además, todo un contrapunto al estreno del equipo de Maca en Primera, ya que éste se dio con la condición de único conjunto con la portería a cero. Porque el Córdoba Patrimonio de la Humanidad abrió la temporada con un valioso 1-0 ante el Osasuna Magna. Después, se impuso al Levante (2-3) y cayó ante el Movistar Inter (2-3). Dicho de otro modo, en ningún caso padecieron los califales una derrota abultada y menos como la del pasado sábado en Torrejón de Ardoz.