Jesús Escribano: “El ascenso es la culminación de un proyecto de varios años”
El Cajasur Córdoba de Balonmano completó una temporada excelente con el premio más gratificante que podía obtener, es decir, el ascenso a División de Honor Plata. Uno de los grandes artífices, pese a que no se viste de corto, es sin duda el técnico Jesús Escribano, el cual afirma que “no podemos ver la temporada como una cosa que empieza en agosto y acaba en mayo”, puesto que “esto es un proyecto que se hizo hace dos años y medio, con la base de jugadores nuestros de cantera y que hemos ido intentando completar con algunos refuerzos de la casa como Julián o Requena”. Por tanto, el preparador apunta que “no es la culminación a una temporada buena, sino de dos años de trabajo muy intenso”.
Así, la entidad granate ha logrado recoger el fruto de una planificación previa, a través de “jugadores que llevan conmigo cuatro años, en los que hemos intentado poner un sistema de juego concreto, una forma de jugar”. Sin duda, desde el último descenso desde la segunda categoría nacional, el crecimiento del club -uno de los más destacados del panorama estatal a nivel de formación- ha sido formidable y ya “el año pasado estuvimos muy cerca” (de subir), subraya Escribano, aunque “ese equipo estaba todavía en construcción y este estaba mas culminado”.
En efecto, el curso ha ido rodado para los cordobeses, que finalizaron líderes del Grupo F de Primera Nacional con un balance de 26 victorias, 1 empate y 1 derrota, mientras que en la fase de ascenso disputada en Vigo, el pleno fue total al vencer al Helvetia Anaitasuna (29-26), Balonmano Elda (22-31) y Lavadores Vigo (26-27). En este sentido, el entrenador cordobés puntualiza que “la clave ha sido la seguridad”, pues “el equipo estaba muy rodado, en muchos aspectos jugaba solo” y “eso es fruto del trabajo, de repetir mucho y también del tiempo que ha pasado”. Un grupo sólido que se ha mantenido unido en el tiempo. “Yo llevo 5 temporadas y las tres primeras prácticamente partíamos de cero, no había continuidad en el trabajo y eso lo notábamos mucho”.
Así las cosas, la ciudad volverá a contar con un representante de balonmano en Plata (en la provincia estará el ARS Palma del Río), lo cual supone “una alegría muy grande”, ya que “llevábamos 40 años sin tener un ascenso deportivo a División de Honor Plata”, resalta. Por tanto, “el momento es bueno si conseguimos que las instituciones, sobre todo el Instituto Municipal de Deportes, nos abonen las cantidades que nos deben de la temporada 17-18 y 18-19”, debido a que “si no las recibimos, nos tendremos que plantear si salimos en Plata. El equipo no se puede permitir repetir una temporada como la de hace dos años, viajando con penurias, con jugadores que por distintas razones no viajaban fuera”, sentencia Escribano, haciendo hincapié en que “esperemos que esas ayudas lleguen y luego evidentemente habrá que trabajar en patrocinadores privados y demás”.
Otro de los pilares fundamentales ha sido en los despachos, desde donde se ha fraguado un éxito puesto en escena sobre el parqué. En este sentido, Miguel Pardo, presidente del club, destaca que en “Vigo pusimos el broche de oro a una gran temporada de nuestro primer equipo”, ya que “tras una liga casi inmaculada, conseguimos el triunfo en los tres partidos de la fase de ascenso, permitiéndonos alcanzar la División de Honor Plata, que llevábamos varios años intentándolo”.
Una promoción que “supone para nuestro club estar en una categoría que creemos más acorde con nuestra historia y el nivel de nuestra cantera, una de las mejores del país”, y que “nos permitirá también poder intentar obtener mayores recursos económicos con los que consolidar nuestro proyecto deportivo”.
Finalmente, el dirigente granate matiza que “personalmente, este ascenso ha supuesto justificar muchos momentos complicados al frente del club y cobrarnos una deuda que probablemente el balonmano tenía con nosotros”, apostillando con una felicitación “tanto a Jesús, nuestro entrenador, como a los jugadores”, pues “ellos ya son parte de nuestra historia”.
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