Córdoba Futsal - Burela FS
—
Crónica
El Córdoba Patrimonio logra una trabajada victoria ante el Pescados Rubén Burela
Un rival directo por la zona media o incluso por la salvación en la máxima categoría del fútbol sala a nivel nacional, por lo que este sábado ante su gente no podía fallar. Aun así, es muy fácil decirlo y no tanto hacerlo, por lo que el Córdoba Patrimonio de la Humanidad retornaba una semana después al Palacio Municipal de los Deportes de Vista Alegre en busca de volver a la senda de la victoria tras la dura derrota ante el Wanapix Zaragoza en territorio maño. Sumar tres puntos era crucial para el primer objetivo de la entidad blanquiverdes: amarrar la permanencia en Primera División lo antes posible.
La importancia del duelo se incrementaba según cómo entrase a la pista el Córdoba Patrimonio de la Humanidad. La derrota hace apenas días en la cancha del colista hacía que la escuadra blanquiverdes tuviese que comenzar el choque con una marcha más que su rival, sobre todo para alejar aún más la zona de descenso a Segunda División. Y ahí, los chicos dirigidos por Emanuel Santoro no decepcionaron, dominando el choque ante un Pescados Rubén Burela FS que se defendió como pudo ante una primera llegada que acabó con Kaluza enviando a saque de esquina un intento de Kaué muy escorado.
Sin embargo, no valía de nada tanta superioridad si no se plasmaba en el marcador del Palacio Municipal de los Deportes de Vista Alegre, y el primer tanto llegó de la manera más inesperada posible. El cuadro gallego cometió un error en la salida de balón que obligó a Kaluza a tocar el esférico en dos ocasiones mientras su equipo combinaba, por lo que los colegiados decretaron libre indirecto para un Córdoba Patrimonio de la Humanidad que a través de Murilo Duarte, previo toque de Pablo del Moral, mandó el cuero al fondo de la red visitante.
A partir de ahí, los chicos de Emanuel Santoro se asentaron sobre el 40x20 califal, sin apenas pasar apuros y con la mirada puesta más en el segundo gol que en una posible reacción del conjunto gallego. De hecho, Arnaldo Báez tuvo en sus botas acrecentar la ventaja en el marcador, pero su disparo lo rechazó no sin problemas Kaluza. Aun así, todos los equipos de Primera División tienen mucho peligro en su zona ofensiva y en cualquier momento puede crear peligro. Tanto fue así que un corte inocente de Araya provocó que se quedase totalmente solo ante un Víctor que no logró desviar la trayectoria del esférico para evitar el empate del Pescados Rubén Burela.
Por tanto, la igualada volvió al luminoso del Palacio Municipal de los Deportes de Vista Alegre. Para unos era demasiado injusto porque el Córdoba Patrimonio de la Humanidad había tenido la batuta del juego e incluso de las ocasiones porque, minutos más tarde, Murilo Duarte rozó el segundo para los locales con hasta dos disparos claros que sacó la defensa gallega. Aun así, lo importante son los goles y ahí el Pescados Rubén Burela se mostró mucho más acertado de cara a puerta, logrando un meritorio empate al descanso.
En la reanudación, la igualdad era más latente, aunque la tónica es cierto que se mantuvo, porque no había ocasiones muy peligrosas que pusiesen en peligro real el marcador del Palacio Municipal de los Deportes de Vista Alegre. Aun así, el Córdoba Patrimonio de la Humanidad estaba siendo muy superior. No tenía la frescura ofensiva de otras ocasiones, pero sí que desactivó a un Pescados Rubén Burela que lo único que intentaba era transiciones rápidas cuando robaba en su propio campo para generar algún tipo de duda a su rival.
A pesar de todo, la sensación que existía en el 40x20 califal es que los chicos dirigidos por Emanuel Santoro estaban más cerca del 2-1 que el Pescados Rubén Burela del 1-2, aunque esto había que materializarlo para que la ansiedad y el nerviosismo no se instaurasen en el ambiente conforme los minutos de la segunda parte iban pasando. Es por ello que el acercamiento más claro por parte del Córdoba Patrimonio de la Humanidad acabó en gol gracias al buen trabajo de Kaué Pereira que se dio la vuelta ante la presión de su par y puso el balón al segundo palo para que Arnaldo Báez adelantase de cabeza al cuadro local.
Merced a este gol, el partido cambió totalmente. El cuadro gallego ahora tenía la urgencia de marcar cuanto antes, aunque apuró hasta los últimos dos minutos para desplegar el portero jugador y generar superioridad. Por su parte, el Córdoba Patrimonio de la Humanidad no pasó apuros hasta ese momento, siendo los últimos 120 segundos de auténtica agonía -con un disparo a la cruceta de Isma incluido-, sabiendo que la victoria era crucial para dar un golpe encima de la mesa importante, y así fue. La escuadra blanquiverde sumó su tercera victoria del campeonato regular y pone una distancia, por el momento, de siete puntos por encima del descenso a Segunda División.
0