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El ‘contagio’ del coronavirus en el deporte cordobés

Imagen del Rally Sierra Morena en 2019 | MADERO CUBERO

Rafael Ávalos

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El impacto es significativo. Quizá más de lo esperado a inicios de semana. Lo cierto es que el Covid-19 ya condiciona sobremanera la vida cotidiana en España. Se trata de la consecuencia directa de la rápida propagación de la enfermedad con origen en Wuhan (China) a lo largo del país. Dadas las circunstancias son muchos los eventos de todo tipo que sufren aplazamientos o, directamente, cancelaciones. No es una excepción el ámbito deportivo, lo que en Córdoba tiene efectos muy claros. Aunque la adopción de medidas en su mayoría se produce a nivel nacional o autonómico, casi la totalidad de los clubes asumen la suspensión de sus próximas dos jornadas. La situación se repite en disciplinas tan dispares como fútbol o balonmano. El particular contagio alcanza en la ciudad también a otras citas como el Rally Sierra Morena o el atletismo popular tras una decisión similar por parte del Ayuntamiento. Y la agenda se vacía…

Cuarentena global: el CSD cierra puertas

La primera novedad de gran calado esta semana, que arrancó con un gran repunte de casos de Covid-19 en España, principalmente en Madrid, llegó el martes. Entonces el Consejo de Ministros recomendó -ordenó- la disputa a puerta cerrada de todas las competiciones, profesionales y no profesionales, a lo largo de, como mínimo, las dos próximas semanas. La medida estaba dirigida por encima de todo a los campeonatos de LaLiga (Primera y Segunda A) y la ACB. Sin embargo, la adopción de la misma era, en cierto modo, una llamada de atención a federaciones, clubes e instituciones. La respuesta no se hizo esperar, si bien…

Se cuelgan las botas en fútbol

Poco después del anuncio por parte del Ministerio de Sanidad, LaLiga comunicó que las dos próximas jornadas (15 y 22 de marzo) pasarían a disputarse a puerta cerrada. Esta circunstancia no tenía efecto directo en Córdoba, donde sus principales clubes aguardaban a otras instituciones. La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) era una de ellas y remitió al miércoles. Fue entonces, un día después, cuando el órgano presidido por Luis Rubiales notificó la propuesta de suspensión -que en realidad era suspensión sin más- de todas las competiciones estatales no profesionales tanto en fútbol como en fútbol sala.

Todos miraban en ese momento a El Arcángel porque, en efecto, el cuadro califal se despedía momentáneamente de su pugna por el play off en Segunda B. El domingo no juega en San Fernando y la siguiente semana tampoco lo hace ante el Talavera. Pero la decisión tuvo lugar para otras muchas entidades, como las tres de la provincia en el Grupo X de Tercera -Ciudad de Lucena, Salerm Puente Genil y Pozoblanco-, además del filial del conjunto blanquiverde, o las de menores categorías. También las de base, cuyos torneos fueron cancelados por la delegación andaluza de la Federación (RFAF). Por supuesto, los campeonatos femeninos no son menos, así que tampoco juegan el Córdoba y el Pozoalbense en la liga Reto Iberdrola.

Tampoco se juega en fútbol sala

Las medidas de la RFEF y la RFAF englobaban a otra disciplina: el fútbol sala. Fue ahí donde surgieron más dudas acerca de la situación. De la disputa de partidos a puerta cerrada el martes se pasó a otra suspensión global. La confirmación llegó primero para el Deportivo Córdoba tras los comunicados federativos: las dos próximas jornadas de la Segunda División femenina también eran aplazadas. Pero aún restaba un equipo, y no menor, en esta modalidad: el Córdoba Patrimonio de la Humanidad, que mantenía en su agenda el choque del sábado con O Parrulo Ferrol. Sin público, claro está. Sin embargo, al mediodía del miércoles la Liga Nacional de Fútbol Sala (LNFS) informó de la cancelación de sus dos siguientes fechas. También se acordaba la inactividad en las pistas.

La capital, sin grandes eventos hasta nuevo aviso

Antes de los anuncios por parte de las distintas federaciones, de los que hubo muchos más, el miércoles arrancó con otra noticia con repercusión. Ésta fue la suspensión de los grandes eventos en Córdoba por parte del Instituto Municipal de Deportes (Imdeco) como mínimo durante marzo. La organización de la MTB Guzmán el Bueno ya había comunicado previamente el aplazamiento de su edición de 2020, prevista para el día 21. Así, desde el Ayuntamiento se cancelaban citas como el Rally Sierra Morena (el último fin de semana del mes) o las carreras de atletismo popular de la capital -en este caso: Puente Romano (domingo 15), Milla Ciudad de Córdoba Las Palmeras (domingo 22) y Cañero (domingo 29).

El efecto dominó: sin balonmano, baloncesto, voleibol…

Superado el mediodía, la agenda deportiva quedaba reducida al polideportivo y con las puertas cerradas siempre. Pero la situación también iba a variar. La liga Sacyr Asobal de balonmano optó ya el martes por el aplazamiento de las dos próximas jornadas, no por la recomendación -orden- ministerial. En esta disciplina, el resto de competiciones sí seguía adelante. Hasta primera hora de la tarde del miércoles: la Real Federación Española de Balonmano (RFEBM) también suspendió sus competiciones hasta el 23 de marzo -las dos próximas fechas y los amistosos-.

En Primera Andaluza de voleibol, en categoría masculina, el Salesianos trabajaba aún con la idea de viajar a Sevilla. En la capital andaluza le tocaba medirse a Las Flores en un play out en que ya selló su permanencia. La puerta cerrada tampoco era opción: la federación autonómica aplazó todos los partidos, con trascendencia o sin ella, hasta el 13 de abril. Dos modalidades recibían atención a partir de ese momento: baloncesto y tenis de mesa. Respecto de la primera, la Federación Española de Baloncesto (FEB) mantenía su postura de disputar los encuentros a puerta cerrada -igual que LaLiga-. Y así lo hacía su delegación autonómica (FAB), que afectaba a los equipos cordobeses. En torno a las seis y media estos supieron que tampoco competirían hasta el día 31 de este mes.

Como es lógico, los aplazamientos afectan a competiciones de escalafones inferiores. El Cajasur Priego y el Hotel Museo Patria Chica, también de dicha localidad, eran en ese momento los únicos conjuntos en gran campeonato que permanecían con duelos a puerta cerrada. Pero… tampoco van a jugar. La Real Federación Española de Tenis de Mesa (RFETM) informó de la suspensión de todos los partidos entre el 13 y el 22 de marzo. Fue así cómo sólo un club mantenía su compromiso de liga: el Benamejí en Primera Nacional de beisbol. Eso sí, sin público. Pero por la noche también se produjo la cancelación.

También afectado el olimpismo

La cadena de anuncios de suspensión comenzó en realidad días antes. Ya la pasada semana la Universidad de Córdoba (UCO) supo de la cancelación de la Panda Raid 2020. El rally por el desierto marroquí desapareció del calendario por decisión del país. Del mismo modo, Julia Figueroa se despidió del Grand Prix de Rabat. El reino vecino decidía así impedir la más mínima opción de expansión del Covid-19. Lo peor para la judoca llegó el martes, cuando la Federación Internacional de Judo (IJF) comunicó que todas las citas continentales hasta el 30 de abril eran canceladas. Algo similar ocurrió para Fátima Gálvez pues la Federación Internacional de Tiro Deportivo (ISSF) también aplazó torneos fijados hasta mediados del próximo mes.

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