Ganas de más

Cuando el trabajo da el resultado esperado, lo cierto es que siempre hay ganas de repetir. En la victoria todo es alegría, aunque solo sirve para tomar impulso de cara al objetivo real. Pero es tan importante la preparación como luego la temporada regular y bien lo sabe Germán Crespo, que está tratando de aprovechar al máximo estas semanas antes del inicio liguero. De hecho, el preparador, dentro de sus posibilidades, está intentando exprimir al máximo el potencial de la plantilla con el fin de llegar a la competición en Segunda RFEF con el mejor tono posible. Es indispensable para ello el entrenamiento, aunque no es menos -o quizá más- el hecho de disputar duelos amistosos. Y es que el Córdoba quiere más después de acumular un excelente estado de forma, y en las próximas semanas tendrá un reto aún más duro, puesto que parte hacia rutas salvajes. Todo lo que resta en el más inmediato periodo preparativo para los califas será lejos de El Arcángel. 

En efecto, el cuadro cordobesista se despidió de su público este pasado jueves con una importante victoria sobre el Extremadura, adversario de Primera RFEF, que viene a prolongar la dinámica del equipo. Juega, disfruta y gana. La receta es perfecta para el objetivo. Y aunque todavía es muy pronto para sacar conclusiones, es innegable que el rumbo fijado por Crespo parece el más idóneo para elaborar la carta de presentación de un plantel que aspira sí o sí al ascenso de categoría. No hay otro objetivo en mente y el preparador necesita para esa dura misión contar con el máximo rendimiento de sus 22 futbolistas, a los que habría que sumar de manera intermitente a los jóvenes del filial que están en dinámica del primer equipo. De hecho, el duelo ante los extremeños sirvió para dar un paso más en ese sentido. Hasta tres jugadores disputaron sus primeros minutos como blanquiverdes en el presente año. Son los casos del guardameta Felipe Ramos, que apunta a titular, además de Samu Delgado y Julio Iglesias, quien dejó una grata impresión al erigirse como referente en la mediapunta. 

A nadie se le escapa que les falta rodaje competitivo y seguro que la visita a la Balompédica Linense de este sábado servirá como un nuevo test para ponerse a tono. El Córdoba viaja a La Línea de la Concepción para medirse al conjunto gaditano a domicilio a partir de las 18:30. Un duelo clásico ya para los califas, que se medirán a un rival de superior categoría en un enfrentamiento que servirá además para conocer al vencedor del trigésimo tercer Trofeo Ciudad de La Línea. De momento, el balance de la pretemporada es favorable para los cordobeses con cuatro victorias y tan solo dos derrotas. 

Pese a que el partido es otro test preparatorio, el paso de los días y el hecho de que el arranque oficial esté cada vez más cerca hace que la fórmula elegida por Crespo cada semana pueda acercarse más a lo que pueda verse luego en la campaña. De momento, lo cierto es que es avance es bueno, pues se ha conseguido frenar la sangría atrás, con notables actuaciones del joven Jaylan Hankins, al que sustituyó, como se ha dicho, Felipe Ramos en el segundo acto del pasado encuentro. El gibraltareño ha mantenido al equipo sólido bajo palos en las fechas recientes, teniendo en cuenta además que los dos porteros llamados a ser los líderes del primer plantel estaban lesionados. Será momento ahora de dar más cancha al veterano arquero al tiempo que se reduce el plazo de recuperación de Carlos Marín. 

En el terreno contrario, también se ha encontrado cierta regularidad ofensiva. No son pocos los efectivos que tiene enchufaos Germán Crespo. La mejor noticia es que todos sus delanteros ya han visto portería, destacando el caso de Antonio Casas, máximo artillero del Córdoba en esta pretemporada. Ahí habría que sumar a Willy y Adri Fuentes, además de De las Cuevas y Puga, quienes también han inaugurado sus cuentas particulares. 

Sea como sea, exigente test para los califas que intentarán no acusar demasiado el cansancio por el corto plazo de recuperación. De hecho, el Linense llegará, a priori, mucho mejor en el terreno físico, pues su último compromiso fue el pasado 15 de agosto. Entonces, el equipo de Antonio Ruiz cosechó un empate sin goles frente al Irak FA.