El CBM saca músculo mirando de frente a la División de Plata

El histórico club cordobés, ya clasificado para la fase de ascenso, busca ahora el título de campeón de su grupo de Primera Nacional | La entidad homenajea a sus bases en el pabellón de Fátima

En Córdoba ha habido, históricamente, buenos equipos en distintas modalidades. Algunos, excelentes. Asunto distinto es hablar de clubes. Ahí siempre ha habido más problemas. Lo de armar una estructura sostenible en el tiempo, con una filosofía propia y una gestión coherente en canchas y despachos viene siendo, tradicionalmente, una cuestión complicada. El Córdoba Balonmano puede decir que lo ha conseguido. Afincado ya en el pabellón de Fátima, el CBM tiene perfectamente consolidado un modelo que le reporta alegrías permanentes en divisiones formativas y una ración de orgullo cuando se llega a las divisiones sénior. Digámoslo claro: en formación son los mejores y desde su cantera se han proyectado jugadores hacia la élite. También hacia los clubes de su entorno, especialmente en la provincia, que han contado con los productos de la factoría granate para sus plantillas profesionales.

En este curso 15-16, la tónica no varía. Una catarata de títulos en las ligas menores, actuaciones entre el notable y el sobresaliente en los campeonatos autonómicos y presencias en las fases finales estatales. No faltan los internacionales. Jugadores como Pablo Martín o David Estepa ya han defendido la camiseta de los Hispanos en juveniles. La base sigue latiendo con fuerza. Y arriba, el equipo sénior está despachando una temporada formidable. ¿Un ascenso a División de Plata?

El Cajasur Córdoba BM de Jesús Escribano es líder dominante en el Grupo F de la Primera Nacional. Tiene ya garantizado el billete para la fase de ascenso a la División de Plata y con tres jornadas aún en el calendario quiere ser campeón. Actualmente, con un balance de 19 victorias, tres empates y una derrota, suma 41 puntos y aventaja en cuatro al Caserío y en once a Arrecife e Ingenio. Lo tiene en su mano. Jugará fuera en las pistas de Ingenio y Manzanares y, en medio, recibirá al Ciudad Imperial en el pabellón de Fátima. Sería en la penúltima jornada y el sueño es cantar el alirón.

Este pasado fin de semana, el equipo sénior disputaba su partido de liga ante el Villafranca de Extremadura. Ganó por 31-25 y dio un paso más en su lucha por ser campeón. Leo Ceballos, Dublino o Padilla volvieron a encandilar a una afición fiel y entendida, que sabe a dónde va y cuáles son los poderes de su club. Y ese momento de bonanza deportiva del primer representante del club sirvió al CBM para reivindicar su esencia. A través de su equipo referente rindió un emotivo homenaje a sus ocho equipos de base que se han clasificado para los CADEBA -el campeonato de Andalucía a nivel de clubes- y los intersectores tras completar brillantes campañas en sus ligas provinciales. Justo antes del inicio del encuentro entre Cajasur CBM y BM Villafranca, la primera plantilla granate realizó un pasillo de honor a esos ocho equipos, ante la presencia de medio millar de espectadores y con la asistencia de Pedro García, primer Teniente de Alcalde del Ayuntamiento de Córdoba; Antonio Rosales, presidente de la Federación Andaluza de Balonmano y vicepresidente de la Real Federación Españoa de Balonmano, e Ignacio del Castillo, delegado provincial de la FABM en Córdoba.

Cunext CBM masculino y Córdoba BM femenino han sido campeones provinciales en alevines; Cajasur CBM ha sido campeón infantil masculino y Córdoba BM B se ha proclamado subcampeón provincial; en cadetes masculinos Cajasur CBM y Dafisa CBM han sido campeón y subcampeón liguero, mientras que Córdoba BM femenino ha acabado segundo en su liga. Estos siete equipos tienen asegurada su participación en el CADEBA, mientras que el octavo, el Cajasur CBM juvenil masculino, ya es subcampeón andaluz y jugará intersector nacional en Ciudad Real. Todos participaron en una fiesta del balonmano que pretende tener un colofón con la fase de ascenso a División de Plata, en la que el CBM acudirá como campeón de grupo. ¿Y anfitrión? En ello está.