De la tirita al botijo: la innovación para uso común

La exposición Héroes ocultos muestra la historia de objetos cotidianos y sencillos irremplazables en la vida diaria que un día fueron producto de la innovación de sus creadores

Héroes ocultos

¿Sabían que un ingeniero dedicó siete años a perfeccionar el mecanismo que hoy conocemos como una simple cremallera? ¿O cómo se perfeccionó la hoy conocida como tirita que antes se usaba tanto para tratar heridas como para arreglar un pinchazo de una bicicleta? ¿O cómo plasmó su idea otro ingeniero para inventar el velcro tras observar cómo las espinas de cierta planta se agarraban con fuerzas al pelaje de su perro?

Observación, perseverancia, investigación e innovación son los valores que se quieren destacar en la exposición Héroes ocultos. Inventos geniales. Objetos cotidianos que muestra la invención de 27 sencillos objetos que utilizamos a diario, utensilios en los que hoy ni reparamos pero que un día supusieron un avance para facilitar la vida de las personas.

A través de esta exposición, que trae hasta Córdoba la Obra Social de La Caixa con la colaboración del Ayuntamiento de Córdoba y que permanecerá abierta al público entre el 9 de septiembre y el 9 de octubre en el Bulevar del Gran Capitán, el público podrá conocer la curiosa historia de inventos sencillos que se han convertido en útiles imprescindibles para el día a día.

Se trata así, según la organización de la exposición, de reivindicar ante el público general “el legado de inventores desconocidos”, sus creaciones y de analizarlas desde la perspectiva de la innovación, la producción, la evolución y la inspiración de sus autores.

El público podrá conocer así la historia de la invención de cada objeto, las condiciones técnicas que se precisaron para su fabricación, la evolución y desarrollo de un mismo objeto desde su invención hasta nuestros días y, también, la estética que inspiró a los inventores a la hora de dar forma a su creación.

Desde un lápiz a la fregona, del plástico de burbujas al clip, de una lata al tetrabrick o de una pinza para tender a un botijo. Sobre todos estos objetos clásicos cotidianos se pone el foco encima en esta muestra para conocer la historia que los hizo, alguna vez, protagonistas de la innovación.