Thomas Köner expone en primicia en el C3A su visión del 'Metrópolis' de Fritz Lang

El Centro de Creación Contemporánea de Andalucía (C3A) presenta en primicia el encargo a Thomas Köner de una nueva banda sonora para la película Metrópolis (1927) de Fritz Lang. El concierto se celebra el viernes 24 de enero a las 20:30 en la Caja Negra.

Köner, uno de los más reputados compositores de música electrónica de su generación, regresa al C3A tras su aclamada interpretación de Fausto (1926) de Murnau el año pasado. Esta vez ofrece un estreno absoluto y afianza una estrecha colaboración con el Centro de Creación Contemporánea de Andalucía.

Metrópolis (1927) se proyecta en versión restaurada con 25 minutos inéditos y música electrónica en vivo, que prolongan el metraje hasta los 150 minutos de duración. Esta nueva banda sonora añade nuevos niveles de complejidad acústica. La banda sonora original fue estrenada el 10 de enero de 1927 en Berlín, a cargo de Gottfried Huppertz. Metrópolis está considerada como una película precursora y una de las obras maestras del cine de ciencia ficción.

Thomas Köner ha compuesto música para cine mudo desde 1994, bien interpretando en solitario o con una pequeña orquesta. Su banda sonora para Fausto de Murnau es resultado de un encargo del Auditorio del Louvre en París, y fue estrenado ahí en 2013, como parte de la muestra De Alemania 1800-1939. Esta banda sonora ha sido publicada en DVD y BluRay por Potemkine Distribution.

Durante los años 90s Köner trabaja como ingeniero de sonido en un estudio de postproducción. Para sus composiciones combina estas estrategias con elementos de la música contemporánea de cámara y la vanguardia-pop. Para Thomas Köner, “sonido e imagen tienen diferentes fechas de caducidad”. “La música pasa de moda más rápidamente. Una canción de los años 20, comparada con la producción actual, parece casi una antigüedad. Por el contrario, las imágenes de Fritz Lang or F.W.Murnau nos causan entusiasmo todavía”, explica el artista.

Thomas Köner piensa que “cada generación tiene el derecho y el deber de recrear la música una y otra vez”. Su obra no consiste en forzar su sonido sobre una obra maestra de casi 100 años de antigüedad, sino conseguir que clásicos como Fausto sean relevantes para el público del siglo XXI. Para Köner: “la música debe dejar su espacio a las imágenes; un espacio en el que poder de las imágenes sin ningún tipo de restricciones pueda explotar”.