El pianista cordobés Pablo Amorós rescata del olvido al compositor Clifton Worsley en su nuevo álbum

El pianista cordobés Pablo Amorós ha publicado recientemente el álbum 12 Boston Waltzes, con piezas inéditas del compositor barcelonés Clifton Worsley, seudónimo de Pere Astort i Ribas, cuya música rivalizaba en popularidad con los grandes autores europeos y americanos en sus propios países, entre finales del siglo XIX y principios del XX.

Worsley logró que sus melodías fueran populares en Berlín (Alemania), París (Francia), Londres (Reino Unido) o Nueva York (Estados Unidos) y que su obra 'Beloved!' fuera una de las más sonadas en los primeros años del pasado siglo.

Pere Astort i Ribas nació en Barcelona en 1872. Amigo desde su juventud de Enrique Granados, empezó a trabajar en editoriales de música, componiendo obras para piano cuyas partituras se vendían con poco éxito, dada la preferencia por autores extranjeros. Fue allí donde, por consejo de un cliente americano, decidió adoptar un sonoro seudónimo anglosajón y las melodías de Clifton Worsley comenzaron a hacerse populares rápidamente.

Aunque posteriormente dio el salto a la música escénica, componiendo varias operetas, su gran éxito fueron los Boston Waltzes o valses lentos, de cuyas partituras y en rollos de pianola vendió cientos de miles de ejemplares.

El pianista cordobés Pablo Amorós ha arreglado y grabado, en un álbum publicado por Discos Marfer, los 12 primeros 'Boston Waltzes', con títulos como el ya citado 'Beloved!', 'The skaters' o 'Mourant d'amour', compuestos por Clifton Worsley y que permanecían inéditos.

Sobre ello, el productor del álbum, Miguel Ángel Sánchez, ha explicado que, “una vez seleccionado el repertorio y localizadas las partituras, entramos en contacto con Pablo Amorós, considerado por la crítica como un pianista de temperamento, de personalidad elegante y carismática, que quedó gratamente sorprendido de la calidad de las composiciones y no dudó ni un segundo en embarcarse en este proyecto”.

El cambio de los gustos musicales, con la irrupción de ritmos como el foxtrot o el charlestón, y la repentina muerte de la hija del compositor a los 19 años en un accidente en 1923, que sumergió a Astort i Ribas en una crisis vital que no logró superar, falleciendo dos años después, hicieron desaparecer a Clifton Worsley de la memoria musical de nuestro país, algo que el álbum 12 Boston Waltzes quiere contribuir a corregir.

Pablo Amorós ha ofrecido conciertos en las principales salas españolas y también de países como China, Estados Unidos, Francia o Emiratos Árabes, y ha grabado la obra completa para piano de Leonardo Balada, el álbum 'Granados vs Falla' y 'Spanish Cello Sonatas', con obras de autores de la generación del 27 musical.