La historia de Trápala: de actuar en cuadras reconvertidas a celebrar sus 50 años en el Gran Teatro

Hace 50 años, cinco jóvenes recién salidos de la Escuela de Arte Dramático de Córdoba decidieron montar un grupo independiente de teatro. Decidieron llamarse Trápala. Eran los últimos coletazos del franquismo, por lo que se antojaba que el aperturismo ya estaba a la vuelta de la esquina. Medio siglo después, algunos de los componentes que aún siguen formando parte de la compañía se subirán el próximo 22 de noviembre al escenario del Gran Teatro para celebrar esta efeméride, así como su futuro.

Uno de esos integrantes es el actor cordobés Juan Carlos Villanueva. No fue uno de los fundadores de Trápala -entre los que se encuentran Francisco y Miguel Ángel Montero, Marina Castro, Miguel Ángel Montero y Carmen Caballero-, pero sí se unió muy pronto a ellos. En total, 16 actores y actrices harán posible el espectáculo Trápala 5.0 en el que se enlazarán las propuestas más emblemáticas de una compañía que es la más antigua de Córdoba.

Villanueva ha recordado cómo Trápala inició su camino con las perspectivas “utópicas de llevar la escena a todos los rincones de España, fuese como fuese”. La muerte de Franco permitió a estos profesionales del teatro salir a los pueblos, aunque aquellos viajes no facilitaron en demasía las representaciones teatrales. “No existía infraestructura y desde la Diputación de Córdoba se nos decía que a los pueblos se iba con una manta y una bombilla. Nosotros luchamos contra eso y mientras se facilitaban esas infraestructuras en los municipios de la provincia”, la institución supramunicipal “construyó una jaima que permitió que esa cultura” fuera por los pueblos de Córdoba. De hecho, Villanueva ha rememorado cómo ha actuado “en cuadras reconvertidas”; unos escalones a solventar qu supuso “abrir el camino a las muchas compañías que vinieron después”.

Sin embargo, vicisitudes varias -en el estreno de su primer montaje (Edipo Rey), la Policía esperó a los actores a las puertas del teatro- e impedimentos como los anteriormente descritos no llevaron a la compañía a replegarse. Al contrario. La prueba está en el aniversario que celebrará en Córdoba el próximo mes de noviembre. A juicio de Villanueva, el espectáculo “rendirá también homenaje a todas las compañías del presente y del futuro, porque gracias a ellas se ha hecho camino”. Las propuestas que llevarán al Gran Teatro serán aquellas “que han dado mucho que hablar, que han sido muy aplaudidas y que han hecho a la compañía sentirse muy a gusto”. Drama, tragedia, contemporáneo, clásico... Trápala ha tocado todos los estilos posibles. Hasta incluso ha estrenado obras de autores vivos, como fue en su momento “las propuestas de Sebastián Cuevas y Antonio Varo”. En esa línea, el actor de múltiples series españolas televisivas ha recordado uno de los últimos trabajo por encargo de la compañía y que supuso “el descubrimiento de un auto sacramental de Ricardo Molina”.

Los 16 actores que participarán en este espectáculo serán, además del propio Villanueva, profesionales como Francisco y Rafael Montero, Carlos Castro, Nieves Palma, Belén Benítez, Marina Castro, Bartolomé García, Carmen Caballero, Mercedes Tirado, Francis de Haro, Marisol Membrillo, Ana Risquez, Ana Castillo, Isabel López y Mario Mouriño. Asimismo, al cante estará David Pino y a la guitarra, Alfonso Linares. Además, a esta celebración se sumarán el Coro de Ópera de Córdoba y Camerata Gala.

El espectáculo transcurrirá con montajes escénicos de los títulos más destacados de entre los 40 que Trápala ha puesto sobre el escenario. Aunque se desconoce cuáles se representarán, lo que sí se sabe es que las obras que no se lleven a escena el próximo día 22 estarán presentes a través de transiciones en las que hablarán personajes de esas obras.

Y, ¿cuál es el futuro de Trápala? El que quieran los que la componen, que está recibiendo savia nueva que “viene con ganas”. Villanueva ha asegurado que la intención de esta institución teatral es que siga adelante, ya que “nuestro trabajo es la resistencia, la persistencia y a la insistencia”. Con esta receta no queda otra que cumplir otros 50 años.