Dos cabalgan juntos, pero con diferentes caballos
Carlos Pardo y Rafael Espejo presentan sus últimos libros de poemas en Córdoba, en Limbo, un nuevo espacio para la creación y la sorpresa en la ciudad
Los allanadores, de Carlos Pardo.
Hierba en los tejados, Rafael Espejo. (premio Ojo Crítico de RNE, 2015)
(ambos en la editorial Pre-textos. Colección La Cruz del Sur)
Crece hierba de infancia en los tejados,
donde siempre es domingo
Cambian los mitos pero esta
sigue siendo la siendo la tierra
donde florece el limonero
La poesía, a veces, es un espejo. O una trampa.
Hemos mezclado unos versos del último libro de Rafael Espejo con el de Carlos Pardo.
¿Funciona?...
Lean uno y otro.
Los dos libros son tan iguales como complementarios. Si uno contempla la naturaleza para llegar al “yo” (Rafael Espejo), otro desmonta el “yo” para llegar a la desposesión del sujeto (Pardo).
Tanto Pardo como Espejo “están, poco a poco abriendo un camino nuevo, mejor dicho, novedoso, en la nueva poesía española”. Así dice un también poeta y profesor de literatura, Juan Carlos Bernier, que presentó el acto.
La perspectiva del tiempo y sus avatares pondrá a estos jinetes en su sitio. Pero, de momento, nos están contando lo que pasa mejor que un telediario.
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