El vandalismo se ceba con el Puente Romano y la Calahorra

En el corazón del casco histórico de Córdoba, en el epicentro de la zona declarada Patrimonio Mundial por la Unesco, el vandalismo ha hecho de las suyas. Este domingo, tanto el Puente Romano como la propia Torre de la Calahorra han amanecido con varias pintadas que han violentado y afeado todo este espacio. Y que incluso llamaban la atención a los turistas que durante toda la mañana han paseado por la zona.

Las pintadas, de corte antisemita, son similares a otras que han ido apareciendo por la ciudad en las últimas semanas, según han constatado diversas fuentes. De su limpieza y retirada probablemente se hará cargo el área de Patrimonio del Ayuntamiento de Córdoba, una vez recibido el parte de denuncia correspondiente.

Las pintadas en este tipo de materiales son especialmente dañinas. El tratamiento que se tiene que hacer a la piedra es sensible, ya que la pintura tiene que ser retirada con agua a presión y un tratamiento químico de la misma para no acabar erosionando el material.

La ordenanza municipal establece importantes sanciones para aquellos que provoquen daños en el patrimonio de la ciudad, especialmente en zonas BIC, como es el caso. Las sanciones pueden ser superiores a los 6.000 euros en estos casos, que podrían considerarse como infracciones graves de la ordenanza de higiene urbana de la ciudad.