'Soy útil' en Sadeco: un baño de realidad para estudiantes expulsados de su instituto

Pedro (nombre ficticio) tiene 15 años y fue sancionado por el instituto donde cursa sus estudios con una semana de expulsión del centro. Durante esos días, en lugar de quedarse en casa, ha acudido cada día de esta semana a las instalaciones de Sadeco y ha realizado distintas labores. Lo ha hecho gracias al programa Soy útil, al que se ha adherido la empresa municipal de limpieza y que supone un baño de realidad, de responsabilidad y de contraste en su rutina para los estudiantes que son expulsados de sus institutos, y que trata de hacerles ver su utilidad en la sociedad.

El programa Soy útil, ideado por el Foro Educación y Barrio Sureste, está dirigido al alumnado con medidas disciplinarias de suspensión de asistencia al centro. Sadeco se adhirió a este programa en noviembre de 2019 y esta pasada semana ha pasado por las instalaciones de la empresa municipal el primer estudiante. “En lugar de que durante esos días se queden en casa jugando a la Play y sin hacer nada, este programa es un choque con la realidad”, explica la coordinadora del proyecto en la empresa municipal, Verónica López.

Y es que al estudiante se le asigna “una tarea, una responsabilidad, una rutina”, donde mostrar su valía y que, además puede servirle como motivación y para desarrollar sus habilidades sociales, señala López. En el caso de Pedro, durante los cinco días del 10 al 14 de febrero ha realizado tareas con el servicio de actividades educativas de Sadeco, colaborando con los educadores y asistiendo a las charlas, además de llevar a cabo tareas de organización en el almacén central, junto a un operario de la empresa, con los útiles y equipos de los trabajadores.

Puntualidad y tareas

“Ha acudido todos los días, ha sido puntual y ha realizado todas las tareas que se le han encomendado”, valoran desde Sadeco sobre la experiencia de este estudiante en su paso por la empresa municipal. Objetivos básicos de una disciplina para unos días en los que acudir a un lugar nuevo y con personas no conocidas puede servir de motivación para los chicos que, precisamente, pasan situaciones con medidas disciplinarias en sus institutos.

Durante los días en los que el estudiante desarrolla su actividad en Sadeco, la empresa municipal está en contacto con el centro educativo, llevan un control de asistencia del estudiante y realizan un seguimiento de la actividad que se lleva a cabo con él.

Sadeco no es al única empresa municipal que participa en el programa Soy útil, al que también están adheridos el Instituto de Gestión Medio Ambiental (Imgema) y Emacsa, además del Banco de Alimentos y la asociación Frater Córdoba. Al otro lado de este programa están cuatro institutos de Secundaria de la capital - IES Fidiana, IES Fuensanta, IES Galileo Galilei e IES Santa Catalina de Siena-, que colaboran para que los alumnos que son sancionados con la expulsión temporal del centro puedan realizar labores de utilidad con estas entidades.