Stop Desahucios: la gota malaya para conseguir acuerdos con los bancos

Al cierre de año, toca hacer balance y eso es lo que ha hecho la plataforma Stop Desahucios en su última asamblea, en la que ha presentado su informe de acciones llevadas a cabo a lo largo de 2017 en la lucha contra el lanzamiento de personas de sus casas. Los números dicen que este año han atendido a un centenar de familias en los distintos puntos de información que tiene establecidos la plataforma por la ciudad. Un centenar de familias que han sido informadas, asesoradas y con quienes se ha estudiado su caso para obtener una salida a cada caso. Y a eso hay que sumar otras 50 personas a las que se ha asesorado específicamente sobre las cláusulas suelo de sus hipotecas.

El informe de Stop Desahucios -al que ha tenido acceso este medio- señala cómo las principales causas por las que las familias buscan la ayuda de la plataforma son, por este orden, la imposibilidad de pagar las cuotas de sus hipotecas, la negativa del banco a renovar el alquiler social concedido con anterioridad, la imposibilidad de pagar el alquiler y las ocupaciones de viviendas.

A un lado de estas situaciones se encuentran las familias y, al otro lado, en la mayoría de las ocasiones, los bancos. En la mediación con ellos para encontrar una solución distinta al desahucio ha trabajado Stop Desahucios durante este 2017. Es el objetivo de la plataforma: perseverar en la mediación, -varias reuniones y propuestas mediante- para que la entidad bancaria ofrezca finalmente una solución a cada familia. Es la acción de la plataforma, como la gota malaya que no deja de caer ante el banco de turno.

En ese ámbito, a lo largo de 2017 la plataforma ha conseguido llegar a 26 acuerdos con entidades bancarias para resolver la situación de otras tantas familias que se veían ante el peligro de un desahucio. Se han obtenido 10 restructuraciones de hipoteca, 8 renovaciones de contratos de alquiler, 6 alquileres sociales y 2 daciones en pago.

Flujo de familias hacia la Oficina Municipal de Vivienda

La atención a las familias, en este 2017 que termina, presenta un descenso con respecto a años anteriores y, según se reconoce en el informe de Stop Desahucios, “en este año, afortunadamente, sigue disminuyendo el número de familias que se acercan a nuestra plataforma”. Lo achacan, no a la resolución de los problemas de base que dan como consecuencia las situaciones de desahucio, sino a la entrada en funcionamiento de la Oficina Municipal de la Vivienda, a la que acuden otras muchas familias que antes, ante la inexistencia de este organismo de la administración, directamente llamaban a la puerta de Stop Desahucios.

Además de la acción directa con los bancos, con respecto al resto de la actividad desarrollada por la plataforma en este año, el informe de balance recoge también un treintena de concentraciones para manifestarse por la solución de los desahucios y problemas adyacentes, concentraciones que han tenido lugar ante la Subdelegación del Gobierno en Córdoba (5), ante la puerta de los juzgados en acompañamientos a 15 familias ante un juicio y en otras ocasiones, ante las oficinas de entidades bancarias (4) y otra media docena de manifestaciones en otros tantos puntos distintos de la ciudad.

Asimismo, Stop Desahucios ha celebrado una docena de actividades propias o con colectivos sociales, además de charlas y talleres, reuniones con distintas entidades y administraciones, desde la Fiscalía a la Oficina Municipal de la Vivienda, pasando por Vimcorsa, la Mesa por la Energía del Ayuntamiento de Córdoba o la propia alcaldesa de Córdoba.

Y, en el horizonte, el 2018 que viene. Para este año, Stop Desahucios se pone “como reto principal” la presentación de la denominada Ley de Vivienda de la PAH, conocida también como 'Las 5 de la PAH', que se presentará en el Congreso a primeros de año. Apoyarán esa presentación “con amplia visibilización en la calle y difusión mediática”, para que se conozcan las 5 demandas que contiene: la dación en pago retroactiva, el alquiler asequible y estable, stop a los desahucios, más vivienda social y los suministros garantizados.