Dos siglos y medio garantizando el derecho a la defensa

Hace dos siglos y medio, cuatro hombres de leyes de la ciudad de Córdoba fundaron la que hoy es la institución civil más antigua de la ciudad: el Colegio de Abogados. El 21 de noviembre de 1769 se redactaron los 31 artículos que conforman los estatutos del Colegio de Abogados de Córdoba, que lleva 250 años garantizando el derecho a una defensa justa de todos los vecinos de la ciudad y la provincia “con el mayor esmero, estudio, aplicación y cuidado”, según escribían aquellos primeros colegiados.

Este jueves, el Colegio de Abogados ha llenado el Palacio de Congresos de Córdoba para conmemorar que lleva 250 años garantizando ese derecho fundamental, ese “trabajo social” tan básico “como es defender”, según las palabras de la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo. “Somos indispensables en la arquitectura social de nuestro país”, dijo Victoria Ortega, presidenta de los abogados españoles. “Este colegio es emblema de una profesión que se siente totalmente orgullosa de lo que es, lo que representa y lo que hace, con uno de los sistemas de justicia pública gratuita más cualificados y completos del mundo”, afirmó.

No le fue a la zaga la propia Carmen Calvo, profesora de Derecho Constitucional en la Universidad de Córdoba de la gran mayoría de los colegiados que asistieron al acto.

“Sois una pieza capital de nuestro artículo 24 de la Constitución, que es la tutela judicial efectiva”, dijo. “Todas las artes que rodean el derecho representan la gran idea humana de hacer posible la democracia, el derecho. Por eso es tan importante no desvincular nunca de la idea política de la democracia, del estado de derecho”, explicó.

La vicepresidenta también habló de mejoras. “Hace tanta falta mejorar todo lo relativo a como transcurre la justicia gratuita como el extraordinario sistema de la defensa. Esperamos desarrollar una ley orgánica de la defensa y un estatuto de la abogacía que permita poner orden, para que sea posible la idea de la justicia más allá de la retórica y la teoría en términos prácticos y sencillos”, dijo.

“Somos indispensables en la arquitectura social de nuestro país. Esta profesión va a seguir protegiendo los valores de libertad, igualdad y justicia que inspiran nuestra Constitución”, detalló Victoria Ortega.

En el acto, también intervino Manuel Cardenete; viceconsejero de Justicia, que en su discurso aseguró que “el 12 de diciembre tendremos presupuestos en Andalucía, en los que habrá 14 millones de euros para infraestructuras judiciales, y siete millones más para la justicia gratuita”. Por su parte, el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, Lorenzo del Río, lanzó un mensaje de que “tras 250 años supone que se ha realizado una función importante porque si no no se celebraría esto. Como juez lo que puedo decir es que seguiremos estando a vuestro lado, en esas preocupaciones, retos y objetivos”.

Mientras, el alcalde, José María Bellido, agradeció la “colaboración mutua, el consejo, el asesoramiento y la disposición a la ciudad” del Colegio de Abogados. “El Ayuntamiento ha colaborado y colabora, como el asesoramiento en violencia de género”, detalló.

El presidente del Colegio de Abogados de Córdoba, José Luis Garrido, arrancó su discurso citando un artículo de las Trece Partidas de Alfonso X El Sabio que precisamente buscaba garantizar una justicia justa y leyó un mensaje del Rey Felipe VI felicitando a los letrados cordobeses por su 250 cumpleaños.

“Libertad, independencia, secreto profesional, compañerismo...”, enumeró el presidente de los abogados cordobeses. “Son solo los valores que han caracterizado desde siempre a todos los abogados cordobeses desde la fundación de su colegio”, detalló. “El artículo 14 de la Constitución destaca que todos los españoles somos iguales ante la ley. Sin duda a esa conquista ha contribuido la abogacía en general y los abogados de Córdoba en particular”, dijo. “Ya los primeros estatutos en su artículo diez se establecía que cada año se nombrarían a cuatro abogados para que defendieran a sus pobres”, aludió, en una clara referencia a la justicia gratuita.