Seis meses de pinchazos telefónicos para destapar un red de narcos
La Audiencia juzga el próximo día 16 a cuatro acusados de traficar con cocaína, hachís y marihuana en Montilla y Baena | Las penas que reclama el Ministerio Fiscal suman 15 años
La sección tercera de la Audiencia Provincial de Córdoba celebrará el próximo día 16 vista oral contra cuatro acusados de un delito contra la salud pública, en concreto tráfico de drogas que presuntamente se realizaba entre las localidades de Montilla y Baena. Todo se destapó gracias a un pinchazo telefónico, autorizado por el juzgado, ante las sospechas de que uno de los acusados, con antecedentes penales y condena de tres años por el mismo delito, había vuelto a las andadas y estaba traficando con drogas en Montilla.
El primer pinchazo telefónico se produce en el mes de diciembre de 2011 y, gracias a él, se pone de manifiesto la relación entre el primer acusado y un vecino de Montilla, sin antecedentes penales, con el que habla casi a diario sobre negocios relacionados con el tráfico de drogas. Las investigaciones siguen su curso y a finales de mayo se autoriza un nuevo pinchazo en el teléfono de este segundo acusado, que a su vez contacta con otras dos personas, residentes en Montilla y Baena, con las que también se prueba su relación en el tráfico de drogas.
Tras más de medio año de escuchas telefónicas, finalmente el juzgado de Montilla, encargado de la instrucción, autoriza la entrada y registro de los pisos de los acusados, tres en Montilla y uno en Baena. En los primeros, los agentes del Cuerpo Nacional de Policía se incautan de 3,5 gramos de lidocaína y unos 20 gramos de cocaína, en los otros dos inmuebles, se localizaron igualmente pequeñas cantidades de droga, para su venta al menudeo, así como una caja de zapatos con 90 billetes de 50 euros y otros 700 euros en efectivo. En el caso del piso de Baena se localizaron, igualmente, pequeñas cantidades de hachís, marihuana, así como ácido bórico, metanos y provirón, sustancias habituales para el corte de la cocaína.
Por estos hechos, el Ministerio Fiscal reclama una pena de tres años para tres de los acusados y el doble para el que contaba con antecedentes penales e inició toda la investigación. De la misma manera, se reclaman multas de 300 euros para los cuatro acusados.
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