Autorizan una cantera a cielo abierto junto a uno de los históricos castillos de Belmez
El Hisn o Castillo de Zuheros es una fortificación andalusí que, pese a su nombre, no está en la Subbética sino en la Sierra Palacios de Belmez. La fortaleza acogió a un poblado que se abandonó en el siglo XIII. Sus habitantes se trasladaron no muy lejos, al actual castillo de Belmez. Sus restos, y los del poblado andalusí, se levantan a 619 metros de altura, en una elevación protegida por el río Guadiato y el arroyo Albardado, y desde la que se atisban también otros castillos del entorno.
Sierra Palacios aguarda en su interior no solo a este poblado andalusí, sino recursos mineros. La Junta de Andalucía acaba de conceder un permiso de explotación a la empresa Calizas de Belmez, que prevé una excavación a cielo abierto, con importantes desmontes de la propia sierra. La intervención, que busca calizas, se desarrollará sobre 20 hectáreas, tiene previsto extraer 2,5 millones de metros cúbicos de material y una excavación de hasta 50 metros de profundidad. Aunque no se intervendrá en la zona del castillo o del poblado andalusí, sí que afectará a su entorno, a los picos de la Sierra Palacios tan característicos y sin los que es imposible entender porqué hace un milenio se habitó esa zona.
El proyecto de explotación se redactó en 2018, pero hasta finales del año pasado no recibió el visto bueno. El plan superó el proyecto de alegaciones y dispone de un informe arqueológico favorable. Aún está pendiente el informe definitivo de la Consejería de Cultura.
Por una ley estatal de los años cuarenta, todos los castillos, tanto los visibles como los que aún estarían por descubrir, son Bienes de Interés Cultural. Estos BICs protegen un perímetro de 50 metros alrededor de la fortaleza. Pero no más. Existen casos paradigmáticos, como el del yacimiento de Medina Azahara en los años noventa, cuando se entendió que además del yacimiento había que conservar su entorno, que entonces se poblaba de parcelaciones irregulares.
El proyecto, al que ha tenido acceso este periódico, señala que “en la explotación se utilizará el sistema de minería a cielo abierto, con bancos de 10 metros de altura, el medio de arranque de la roca caliza será mediante explosivo, realizando voladuras sobre los bancos de explotación, conforme al proyecto de voladuras, donde se determinará la dimensiones y volúmenes de éstas”. Se estima una producción anual de 75.000 metros cúbicos de roca caliza al año, en una vida 32 años de explotación.
Ocupación desde el Neolítico
Según investigaciones de la Universidad de Córdoba, “la Sierra Palacios ”está formada por tres picos rocosos situados a 100 metros sobre el valle del rio Guadiato en el término municipal de Belmez. Aquí se documenta un poblado prehistórico y un lugar de enterramiento en cueva. Su ocupación va desde el Neolítico Final hasta el Final del Calcolítico (5500-2500 a. C aprox.)“.
En su informe, Cristo Ropero señala que “en esta montaña, también se encontró una cueva con un enterramiento, estaba situada donde actualmente se localiza la cantera. Este enterramiento estaría relacionado con el primer poblado situado en la parte baja; los lugares de enterramiento del segundo momento sería un conjunto de dólmenes cuyo ejemplo más significativo el del Dolmen de Casas de Don Pedro”.
Sobre el Hisn o Castillo de Zuheros, la fortificación “se encuentra realizada con sillares de diverso tamaño, de aspecto redondeado, asentados toscamente otorgando a los muros un carácter irregular. Esta técnica constructiva también se da en las fortificaciones cercanas de Espiel y Dos Hermanas. En el interior se encuentra un aljibe de planta rectangular, edificado en mampuesto y actualmente sin bóveda. La presencia de esta tipología de aljibe, así como de numerosos restos cerámicos en superficie de adscripción califal y posterior, hacen datar este poblado fortificado en los siglos X al XII”.
En la zona donde se va a intervenir ya ha habido canteras con anterioridad, algunas incluso ilegales, como reconoce el propio proyecto de explotación, que prevé aprovechar parte del material allí depositado. Eso sí, ninguna de las dimensiones de la mina a cielo abierto que se ha previsto.
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