La Policía investiga la casa de donde pudieron salir los capiteles

Los agentes hablan con vecinos de la vivienda con patio del casco histórico y siguen el rastro de las piezas califales que no fueron vendidas por Sotheby's

La Policía Nacional estuvo investigando durante toda la jornada de ayer la casa con patio en la que supuestamente estuvieron los capiteles que finalmente no fueron vendidos por la casa de subastas de Sotheby's. Según ha podido saber este periódico, los agentes han estado recogiendo testimonios de varios vecinos del entorno de esta vivienda del casco histórico de Córdoba en la que estuvieron las piezas al menos hasta el año 2003, la fecha en la que murió el titular de la casa, en la que hoy no vive nadie si no que está ocupada por un local.

Los agentes avanzan una investigación iniciada el martes de esta misma semana cuando conocieron el testimonio de un vecino que aseguró haber visto los capiteles en la casa haciendo las funciones de maceteros. En la investigación trabajan también agentes de la Brigada de Patrimonio de la Policía Nacional con sede en Madrid, aunque está siendo dirigida desde Córdoba.

El objetivo principal de la Policía es tratar de saber cómo han podido salir de la ciudad dos capiteles de tanto valor (muy similares a los que hay expuestos en el Museo Arqueológico de Córdoba, tal y como reconoce la propia casa Sotheby’s) y han llegado a una subasta que recuerda mucho a la que se produjo hace cinco años con las famosas vigas de madera de la Mezquita de Córdoba.

Fuentes policiales admiten la complejidad del caso que investigan. La opacidad de la casa Sotheby’s sobre la identidad del propietario actual de los capiteles es absoluta. Además, la firma está protegida por las leyes británicas, muy restrictivas a la hora de revelar de dónde han podido salir estas piezas y cómo han llegado hasta donde han llegado.

En la descripción que se hace de una de las piezas en la página web de la sala, se hace referencia a tres capiteles similares que se encuentran en el Museo Arqueológico de Córdoba atribuidos a Medina Azahara y labrados en mármol en los periodos de Abderramán III (912-961) y Alhaken II (961-976). Ambos capiteles derivan del estilo clásico corintio, influido por los rasgos visigodos y bizantinos con el típico efecto de nido de avispa, obtenido por la técnica de la trepanación. Ejemplos parecidos, señala la sala, pueden hallarse, asimismo, en el Museo de la Alhambra de Granada.

El segundo capitel, más sencillo, también se sitúa en el mismo periodo de ambos califas cordobeses. En su catalogación, se encuentran vínculos con otros similares presentes en las colecciones del Museo de Arte de Cataluña, en Barcelona; el Museo Arqueológico de Córdoba; el Museo de Arte de Nueva York, el Museo del Louvre, en París y el Museo Arqueológico de Madrid.