La mujer desalojada de Chinales rechaza la oferta de una habitación para ella y sus hijos

La mujer desalojada de las naves de Calmante Vitaminado y a quien el Ayuntamiento de Córdoba le había ofrecido una habitación en una pensión hasta el próximo domingo ha rechazado esta propuesta, ya que considera que no soluciona el problema que seguiría teniendo el resto de su familia, que sigue viviendo debajo de un puente. La condición que impuso el Consistorio es que la habitación fuera exclusivamente para esta mujer y sus tres hijos menores.

El ofrecimiento estaba estipulado hasta final de semana para que estas cuatro personas pudieran tener un techo mientras buscaban un lugar en el que instalarse. En la toma de esta decisión influyó la existencia de esos tres menores que, inevitablemente, volverán a vivir debajo de un puente hasta que encuentran dónde asentarse.

Desde el Consistorio explicaron el pasado lunes que “la Casa de Acogida está llena y, además, no se ha considerado que sea un ambiente apropiado para los menores”. Al resto de la familia del asentamiento desalojado se le ha ofrecido poder usar las duchas y las lavadoras que hay en la antigua escuela infantil, así como el resto de servicios de día que hay en la Casa de Acogida.

La propietaria de las naves de Calmante Vitaminado, la compañía Coral Homes, denunció a los ocupantes el pasado 2018 y tras una vista, el Juzgado de Primera Instancia número 6 de Córdoba decretó el desalojo para el mes de mayo. El desahucio quedó suspendido después de que Coral Homes se hiciera con estos terrenos, que anteriormente eran propiedad de Caixabank. Una vez cambiada titularidad, el juzgado notificó a las familias la fecha del desalojo que, esta vez sí, se llevó a cabo.