Estación del AVE: diez días sin limpiar por huelga

La decena de empleados de Estaciones del Sur se niegan a nuevos recortes que pueden suponer el despido de dos compañeros

La huelga de los trabajadores de la empresa Estaciones del Sur en Córdoba, UTE concesionaria de la limpieza en la estación del AVE, ha cumplido hoy su décimo día. Y las consecuencias en la principal puerta turística de la ciudad son patentes: pasillos llenos de basura; papeleras rebosantes; viajeros sorprendidos por la primera imagen que reciben de Córdoba. El paro de los diez trabajadores (hay otra empleada que se encuentra de baja) es una medida de presión y de protesta para evitar el nuevo recorte que la empresa quiere aplicar por unas pérdidas acumuladas en toda Andalucía el año pasado de 108.000 euros. La huelga se sigue en el resto de estaciones donde esta firma da servicio en la comunidad.

“En enero de 2014 nos hicieron un recorte de un 26% de tiempo y de sueldo. Ahora quieren aplicarnos un nuevo reocrte del 20%. O eso o despedirán, solo en Córdoba, a dos de nosotros”, afirma el Diego León, portavoz de los trabajadores en huelga. De los diez miembros de la plantilla en activo, cinco trabajan a jornada completa, mientras que el resto lo hace a media jornada. “No sabemos a qué dos grupos afectaría el paro pero nos negamos a esa salida”, aclara León.

La huelga sigue. Los contactos con la empresa no han surtido ningún efecto. El lunes, empleados y empresarios se sentaron por primera vez en una mesa de negociación. “No sirvió para nada. Nos dijeron que seguían manteniendo las dos alternativas, recortes o despidos. Y nosotros no desconvocamos la huelga”, zanja el trabajador, que lamenta que tampoco desde Adif se han puesto en contacto con ellos.

Los empleados van todos los días a la estación para hacerse ver y oír. Y explicar a los viajeros cuáles son los motivos del paro y las razones por las que se encuentra así la estación. “Hemos hecho turnos y procuramos que al menos haya dos de nosotros siempre aquí”, termina Diego León, mientras algunos de sus compañeros se hacen oír con sirenas. La huelga sigue.