Emacsa quiere que dejes de comprar agua embotellada y bebas del grifo
La empresa municipal de aguas de Córdoba Emacsa quiere que dejes de comprar agua embotellada por que la calidad de la que sale del grifo es similar e incluso superior. Ese es uno de los objetivos de la empresa con motivo del Día Mundial del Agua, que se conmemora el próximo 22 de marzo.
En su campaña de concienciación, Emacsa va a comenzar a repartir botellas de cristal y jarras para que los ciudadanos y también los restaurantes y bares de la ciudad empiecen a sentirse orgullosos de su agua potable. “Que esta ciudad consuma agua del grifo”, resumió la alcaldesa, que anunció que las botellas se distribuirán entre establecimientos ya comprometidos y la federación de vecinos Al Zahara.
Tanto el Ayuntamiento como la propia Emacsa, convierten a Córdoba en la primera ciudad en seguir las indicaciones que se señalan en el Anteproyecto de Ley para la Promoción de una Vida Saludable y una Alimentación Equilibrada en Andalucía. Con posterioridad, Emacsa prevé realizar un estudio profundo de su red de fuentes públicas de agua potable con el objeto de no sólo favorecer el consumo de agua de grifo en hogares y restaurantes, que es en definitiva el fin de esta primera fase que se está desarrollando, sino de acercar el agua a la ciudadanía en calles, parques y jardines.
Las primeras botellas y jarras que se distribuirán han tenido un diseño especial. Emacsa convocó un concurso de ideas al que se presentaron más de 150 propuestas que finalmente ha ganado el cordobés Jorge Chastang, con un guiño a una celosía de la Mezquita convirtiéndola en un copo de nieve.
El objetivo es además lograr que los cordobeses se sientan orgullosos del agua que beben, como ocurre en París donde en todos los restaurantes se sirve agua del grifo. De hecho, en los años ochenta, el agua del grifo en Córdoba se conoció como Fino Anguita, por la calidad del servicio de Emacsa.
Hoy, Emacsa sigue siendo una compañía pionera. La gerente de la empresa, Claudia Zafra, explicó que la compañía no usa cloro en el tratamiento, sino un sistema menos agresivo como es el biosólido. Sin cloro se consigue que el agua potable que sale por el grifo en Córdoba ni huela ni tenga mal sabor.
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