Así dispensa el hospital, automáticamente, las medicinas a las habitaciones

La farmacia del hospital Reina Sofía recuerda, salvando las distancias, a populares series televisivas como Breaking Bad. Ojo: es un lugar en el que todo lo que se produce es legal, pero es lo que pasa cuando la física y la química se ponen en marcha a toda velocidad y de manera automática. Junto al centro sanitario trabajan unas 62 personas en convertir todo lo que tocan en las medicinas que reciben, cada día, cada hora y prácticamente a cada minuto, todos los enfermos que acuden al centro sanitario. Y ahora, por fin, lo hacen ya de una manera automatizada.

En una de las salas, por ejemplo, dos trabajadoras hacen pequeñas cajas. Dentro, colocan el medicamento necesario y con su dosis exacta que requiere cada paciente. A su vez, introducen las cajitas dentro de unas cintas transportadoras que rápidamente llegan a las habitaciones, las urgencias que lo necesiten o a las consultas médicas.

Este lunes, el consejero de Salud, Aquilino Alonso, ha visitado las instalaciones. En la unidad de farmacia, ha asegurado que el aumento de espacio permite hacer una distribución de espacios diferenciados, lo que supondrá un incremento en la calidad que se preste a los diferentes servicios del hospital y a los usuarios que acuden a recibir su tratamiento. En esta línea, la nueva farmacia cuenta por ejemplo, con dos accesos diferenciados para profesionales y usuarios y suma un nuevo espacio que permitirá el desarrollo de formación, sesiones clínicas e incluso crear nuevos despachos si fuese necesario.

Otra de las mejoras de las nuevas instalaciones es que se han creado almacenes independientes que dan servicio a cada una de las áreas de actividad de la Unidad, permitiendo agilizar el trabajo de los profesionales e incrementar los estándares de calidad en el almacenaje de los diferentes tipos de fármacos. Además, se ha pasado de un espacio de trabajo para profesionales a ocho.

El Hospital Reina Sofía es el primer centro de Andalucía en incorporar cinco salas blancas al servicio de Farmacia. Estos espacios cumplen la máxima exigencia para elaboración de preparados, como son los tratamientos personalizados de quimioterapia, muestras para ensayos clínicos, jeringas intravítreas y fórmulas estériles, entre otros.

Todas las salas se ubican en la misma área, ya que son anexas y a todas se accede por un espacio central que les da servicio y que comunica con un almacén exclusivo para estos espacios. Las salas tienen diferentes condiciones de presión que se establecen en función del producto a preparar. Concretamente hay tres de presión negativa para los materiales biopeligrosos y dos positivas para el resto.

Cada sala cuenta con una entrada para profesionales y un dispositivo para pasar los materiales denominado. En definitiva, con estas instalaciones se incrementa la seguridad en el proceso de elaboración de los medicamentos, que supera las 500.000 unidades de preparados para pacientes ingresados y externos al año.

La incorporación de la última tecnología en gestión, distribución y almacenamiento de fármacos es una de las principales características de la nueva farmacia hospitalaria. En este sentido, se ha pasado de las estanterías tradicionales a sistemas de almacenamiento (carruseles horizontales y verticales) que permiten el almacenaje de medicamentos con mayor seguridad. Además, esta innovación facilita la dispensación del medicamento, ya que ahorra tiempo y reduce el riesgo de error.

Estos sistemas unidos a la informatización de las diferentes funciones permiten ofrecer un servicio integral al paciente. Así, por ejemplo, en la actualidad el profesional de oncología puede prescribir un medicamento desde la cama del paciente que está ingresado, esta 'orden' llega a la Unidad de Farmacia, allí es validada por los farmacéuticos especialistas que, a continuación, graban la petición en el sistema informático generando una orden de preparación de un fármaco o que se extraíga del almacén y acabe finalmente en el carro de medicación que distribuye las dosis de los pacientes ingresados.

La Unidad de Gestión Clínica de Farmacia Hospitalaria es un servicio transversal a toda la estructura hospitalaria que permite garantizar la calidad, soporte y el beneficio máximo en el proceso farmacoterapéutico de los pacientes atendidos.

Además, la UGC tiene una dimensión provincial, por lo que los servicios de farmacia del Distrito Córdoba-Guadalquivir y las Áreas Sanitarias Norte y Sur de Córdoba comparten sus sistemas de gestión de compras y se realizan actividades en común en distintas áreas (elaboración de medicamentos, formación continuada, etcétera).

FARMACIA EN DATOS

La Unidad de Gestión Clínica de Farmacia Hospitalaria del Reina Sofía maneja un importante volumen de productos. Sólo durante el pasado año se recibieron 1.810 medicamentos distintos (más de diez millones de unidades).

La robotización ha permitido aumentar la eficiencia del proceso, disminuyendo el 'stock' y agilizando el proceso de preparación de pedidos. El número de pedidos año se sitúa en torno a 33.000 pedidos y 180.000 líneas.

Según los datos de la última memoria anual las principales líneas de producción han sido: 230.000 capsulas, 2408 soluciones orales, 1700 papelillos, 516 soluciones tópicas, 503 pomadas. La mayor parte de la producción se concentra en: nutriciones parenterales pediátricas (2000 al año) y adultos (1200 al año), inmunoglobulinas, anticuerpos monoclonales y antiinfecciosos.

En los últimos años la media de pacientes para los que se han preparado tratamientos ha sido de 2.300, para 18.000 sesiones de tratamiento. En estos momentos se dispensa medicación diariamente para 900 pacientes ingresados.

En el año 2016 se han dispensado tratamiento para 26.000 pacientes, en concreto más de 1.200 medicamentos con un total de 3 millones de dosis. Además, a través de la Comisión de Farmacia y Terapéutica (en la que se deciden los medicamentos que se utilizan en un hospital) se han revisado 40 medicamentos.

Además, la Unidad dispensa medicamentos a pacientes ambulatorios. Sólo durante el pasado año se prestó servicio a 9.456 pacientes generando más de dos millones de dosis.

En cuanto a la gestión de los pedidos de medicamentos para su distribución en puntos de consumo, la Unidad de Farmacia ha preparado en el último año 33.762 pedidos con 184.738 líneas. Se han dispensado 1.609 medicamentos, más de 5,2 millones de unidades a 289 puntos de consumo. Para ello, durante el año 2016 las compras realizadas han ascendido a 62 millones de euros, correspondientes a 14.176 pedidos a 186 laboratorios.

Fuera de las nuevas instalaciones la Unidad de Farmacia mantiene infraestructura adicional integrada en la Unidad de Gestión Clínica de Análisis Clínicos, donde una farmacéutica lleva a cabo la monitorización de niveles plasmáticos de diversos fármacos para ajustar su dosis, contribuyendo a la individualización del tratamiento. Actualmente se superan las 20.000 determinaciones anuales con informes de ajuste de dosis para los pacientes.

INVESTIGACIÓN

Esta área contribuye además, al desarrollo de 180 ensayos clínicos en el hospital a través de la gestión de medicamentos que se utilizarán, garantizando la correcta utilización de los medicamentos y colaborando en la monitorizacion de los estudios.

Por último, la Unidad de Farmacia Hospitalaria posee líneas de investigación propias en la monitorización de fármacos y en estudios de utilización de medicamentos, con tres tesis en marcha sobre estas líneas. A nivel docente, los farmacéuticos se integran en programas de formación continua y participan en la preparación de farmacéuticos especialistas en Farmacia Hospitalaria y en la tutorización de alumnos pregrado y técnicos de farmacia.