Córdoba: cada vez menos bebés, cada vez más defunciones

La capital aguanta el tipo y mantiene el crecimiento vegetativo, pero en la provincia ya muere mucha más gente de la que nace, lo que hace que mengue la población

Es la crisis demográfica que viene. En la provincia de Córdoba, cada vez nacen menos bebés y cada vez hay más defunciones. El resultado: el crecimiento vegetativo es negativo. Por tanto, la población baja de manera alarmante, agravada además por una emigración por cuestiones económicas que no cesa. El Instituto Nacional de Estadística (INE) publicó este jueves los datos del Movimiento Natural de Población del año 2015. Los resultados asustan y muestran una diferencia sustancial entre la provincia y la capital.

En la provincia (incluyendo los datos de la capital) el año pasado nacieron 7.044 bebés mientras que murieron 7.872 personas. Eso deja un saldo negativo de 828 habitantes menos en solo un año. La diferencia, además, con 2014 es significativa. Entonces, hubo más nacimientos que muertes en la provincia, con un crecimiento vegetativo de 14 personas.

En la capital, el crecimiento vegetativo sigue siendo positivo. En Córdoba ciudad nacieron más niños que murieron personas. En concreto, la diferencia es de 133 (frente a los -828 del total de la provincia). Así, en 2015 en Córdoba capital nacieron 3.005 bebés, frente a las 2.872 defunciones registradas. Aunque los datos son positivos, se nota un fuerte retroceso con respecto a 2014. En ese año, en Córdoba nacieron 3.129 niños frente a los 2.565 cordobeses que fallecieron.

A nivel nacional y según datos provisionales, el crecimiento vegetativo de la población residente en España (es decir, la diferencia entre nacimientos de madre residente en España y defunciones de residentes en el país), fue negativo en 2015 en 2.753 personas. Es la primera vez que esto sucede desde que se dispone de datos anuales en la serie histórica homogénea.

El saldo vegetativo (nacimientos menos defunciones) fue negativo en 10 comunidades autónomas y positivo en siete. Las tres comunidades con saldo vegetativo menor fueron Galicia (–12.269), Castilla y León (–11.883) y Principado de Asturias (–7.089) y las que registraron el saldo vegetativo mayor fueron Comunidad de Madrid (17.912), Andalucía (8.546) y Cataluña (5.092).