La Comisión de la Verdad pide a la ciudadanía que no se deje confundir con propuestas de “concordia”

La Comisión de la Verdad de Córdoba, que aglutina a 15 asociaciones memorialistas de la provincia de Córdoba que persiguen “la verdad, la reparación y la justicia para las víctimas del golpe de Estado del 18 de julio de 1936, de la Guerra Civil y de la dictadura franquista”, ha hecho este miércoles un llamamiento a la ciudadanía, “para que no se deje confundir con propuestas de concordia que no pretenden más que ocultar los crímenes, poniendo en el mismo plano a víctimas y victimarios”.

En este sentido y en un comunicado, dicha plataforma ha señalado que para la misma “todas las víctimas son iguales, sean de donde sean”, de modo que, “si están desaparecidas, si no han tenido justicia o si están sin reparar, a todas ellas les deben asistir las leyes y los gobiernos”.

Por eso, según ha subrayado la Comisión de la Verdad, “confundir a víctimas y victimarios es repetir ese 18 de julio infame cada año, en un sinfín interminable de oprobio que, como sociedad, no nos podemos permitir si queremos avanzar con dignidad y decencia”.

Por eso, y “sin ánimos partidistas y con el objetivo de dar cumplimiento a los Derechos Humanos y a las sucesivas demandas que desde organismos internacionales se han hecho a diferentes gobiernos de España”, la intención de la plataforma es “cerrar una herida que lleva demasiado tiempo abierta y supurando, una herida que impide que un país pueda avanzar sin rémoras”.

A juicio de la Comisión de la Verdad, “es muy doloroso y vergonzoso que España sea el segundo país, después de Camboya, con más desaparecidos del mundo, que archivos fundamentales para conocer lo sucedido estén abandonados o en peligro de deterioro, que criminales y torturadores sigan paseándose por nuestras calles condecorados, y que lo sucedido no sea suficientemente conocido y recordado para evitar que vuelva a suceder”.

En este sentido, la plataforma ha recordado que “el 18 de julio de 1936 un golpe de Estado intentó acabar con un gobierno legítimo de manera brutal, con la excusa de la violencia política que se vivía durante la II República, que era similar a la existente en países europeos del entorno y 1.000 veces menor que la provocada durante el propio golpe de Estado y la subsiguiente guerra y dictadura, desatando desde el primer día un plan sistemático represivo, organizado por las máximas autoridades golpistas, con una violencia que sería el fundamento y sustento de la dictadura posterior hasta la muerte del dictador, y más allá”.

De hecho, “la falta de una ruptura democrática durante la llamada Transición dejó multitud de aspectos sin resolver, y la llamada Ley de Amnistía de 1977 se configuró como una ley de punto y final, que mantuvo en clara indefensión a multitud de víctimas del franquismo”.

En Córdoba, “con más de 10.000 represaliados políticos”, hay “multitud de fosas comunes y multitud de familiares que buscan a los suyos en un paisaje de vergüenza, que ha de dibujarse con otros colores que no sean los negros y grises de la infamia, de una vez y para siempre”, razón por la que la plataforma exige “que se exhumen las numerosas fosas comunes de la provincia y las existentes en los cementerios de San Rafael y La Salud de la capital, con alrededor de 4.000 cordobeses asesinados, cuyos familiares no han podido cerrar el luto en un hecho de verdadera injusticia, incomprensible para la comunidad internacional”.

Del mismo modo, la Comisión de la Verdad reclama “que se recuperen, conserven y digitalicen los archivos que, como el de la antigua prisión de Córdoba, contienen los datos de esa represión masiva y sistemática que explica nuestro pasado, pero también nuestro presente, y que impide un futuro limpio de herencias infaustas”.