El Cabildo reclama al Consistorio bienes de la ermita de la Salud

Pedro García dice que si la Iglesia es su propietaria se devolverá pero le recuerda que el Ayuntamiento también pide la devolución de la plaza del Pocito o el Triunfo de San Rafael

El Cabildo de Córdoba ha reclamado al Ayuntamiento la devolución de una serie de bienes procedentes de la ermita de la Salud, avanza este jueves la prensa local de Córdoba. El pequeño templo fue cedido al municipio en 1846 y los cuadros y joyas del mismo terminaron almacenados en dependencias municipales. Entre ellos, el mismo crucifijo que la alcaldesa, Isabel Ambrosio, encontró al llegar al cargo y que mandó retirar. Ahora, el Cabildo pide esos bienes por escrito.

“Desconozco cuáles son los bienes que reclama el Cabildo pero le recuerdo que nosotros [el Ayuntamiento de Córdoba] le reclamamos otros muchos”, ha respondido esta mañana el primer teniente de alcalde, Pedro García. “Cuando quieran, nos sentamos y hablamos del Pocito, el Triunfo de San Rafael, la Mezquita para ver si llegamos a algún acuerdo”, ha dicho irónicamente.

No obstante, García ha subrayado que si es propiedad del Cabildo habrá que devolverlo. “Porque nosotros no queremos lo que no es de los cordobeses, aunque ellos [el Cabildo] sí lo quieren [lo que no es suyo]. Como es lógico, vamos a devolver lo que le corresponde a su propietario, que es exactamente lo mismo que nosotros les pedimos con la plaza del Triunfo, con la Mezquita-Catedral o con la plaza del Pocito que dicen que son de su propiedad”, ha proseguido. De esta forma, el primer teniente de alcalde ha hecho un símil con los resultados deportivos para afirmar que “con el Cabildo estamos uno a uno”.

Según señala la prensa local, el Cabildo se ha dirigido al Ayuntamiento hasta en cinco ocasiones desde 2007 pidiendo los bienes. Ese periodo incluyen los cuatro años en los que la ciudad estuvo gobernada por el PP. El proceso de devolución comenzó en 2006 con el retorno a manos eclesiásticas de la ermita. Pero algunos de los bienes muebles siguieron en dependencias municipales a pesar de que la Junta de Gobierno Local acordó, dos años antes, devolver las joyas y los cuadros a la ermita.