Más de 10 años esperando un ascensor: los vecinos de la calle Pocito siguen en pie por su elevador
Las familias del número 3 de la calle Pocito no dan crédito a lo que les sucedió el pasado mes de diciembre y que conocieron en mayo. Pendientes de que comiencen las obras para la instalación del ascensor que les prometió la Junta de Andalucía, la empresa constructora (Aplicaciones y Soluciones Integrales Técnicas de Córdoba, Asolyte) retiró más de 15.000 euros de la cuenta finalista abierta para la colocación del elevador, sin haber iniciado las obras.
Este bloque de vecinos está formado por 16 familias y la media de edad ronda los 65 años. En 2009, la Junta de Andalucía les concedió la obra, otorgando una subvención del 75%. El 25% restante fue abonado por los vecinos a una cuenta finalista que el Gobierno andaluz les obligó a crear para tal fin. Tres años después, en mayo, recibieron el aviso de que la falta de presupuesto provocaba un retraso en el cumplimiento del convenio. Ya entonces las familias habían desembolsado 4.000 euros por la licencia de obras -ya caducada- y más de 22.400 del 25% de la instalación del ascensor que habían de abonar. En definitiva, el desembolso por familia asciende ya a 1.600 euros.
Cuál fue al sorpresa cuando los vecinos se percataron de que la empresa encargada de las obras había emitido dos pagos a dicha cuenta: uno de 9.171,01 euros y otro de 6.419,70, abonados el 12 y el 17 de diciembre. Una vez conocidos estos pagos, los vecinos se pusieron en contacto con AVRA (Agencia de Vivienda y Rehabilitación de Andalucía) para saber quién había autorizado esos cobros, ya que una de las cláusulas de la cuenta señala la necesaria autorización de AVRA. La agencia les certificó que ninguno de sus trabajadores había dado su aprobación por lo que los vecinos no entienden cómo Cajasur emitió esos pagos.
Tras esta confirmación de AVRA, los vecinos solicitaron urgentemente una reunión con el administrador del bloque, de la empresa Horizontal Administración de Fincas (entidad que engloba a Asolyte, la adjudicataria de las obras), que les aseguró que “no había ningún problema y que la compañía iba a devolver el dinero”. Una de las vecinas cuenta a este periódico que el administrador les comentó “que las obras iban a empezar ya”, afirmación que rechazaron de pleno ya que AVRA les había confirmado que el pago sólo podía hacerse una vez iniciadas las obras.
De aquella reunión, fechada el 21 de mayo, se emitió un requerimiento a Asolyte para que abonara el importe total (15.590,71 euros) en un plazo máximo de 24 horas. Sin noticias ni de la empresa ni del dinero, Asolyte comunicó el 29 de mayo a esta comunidad de vecinos que renunciaba a la ejecución de las obras de la instalación del ascensor, “habiendo sido retirada la confianza” en la compañía.
Por el momento, dichos pagos no se han efectuado y los vecinos aseguran que ni administrador del bloque ni la constructora “dan la cara”. Temen ahora que AVRA autorice el inicio de las obras, ya que si la cuenta finalista no presenta los recursos económicos necesarios -como ocurre actualmente- las familias deberán iniciar el proceso de nuevo tras más de diez años batallando por su ascensor.
Asolyte explica que todo se ha realizado conforme a la ley
Por su parte, según ha explicado la empresa Asolyte, el pasado mes de noviembre el convenio de colaboración entre AVRA y este bloque de viviendas sufrió una modificación que estipulaba que en la cuenta debían abonarse en el 2018 un total de 39.280,09 euros y, en 2019, un ingreso de la misma cantidad. A partir de esa firma, explican desde Asolyte, “AVRA debería haber abonado la primera mitad en 2018 que todavía no se ha ingresado”.
La compañía apunta, además, que AVRA ha informado “incorrectamente” a la comunidad de vecinos en relación al cambio en el convenido de colaboración. En ese cambio (adenda) “en ningún caso viene recogido que la empresa constructora no pueda realizar cobros para el pago del material, electricidad, albañilería, permisos, seguros, estudios de seguridad, pago a cuenta del ascensor”, según detalla la empresa a través de un comunicado remitido a este periódico.
Con el presupuesto aprobado y el contrato firmado, Asolyte podía hacer uso de la cuenta finalista para costear todo lo necesario para el inicio de las obras, todo gracias a dicho cambio en el convenido de colaboración, según explican en el escrito. Además, Cajasur resolvió a favor de Asolyte la reclamación de los vecinos en relación a esos dos cobros ya que consideró que se ajustaban a lo estipulado en el convenio.
A todo ello se sumó, según la compañía, el cambio de director técnico de AVRA, que ralentizó los procedimientos, aun habiendo anunciado a Asolyte que “con fecha 19 de enero de 2019”, era cuestión “de dos semanas el nuevo nombramiento”. Desde esta fecha, Asolyte está esperando “un director técnico para que se inicien las obras” ya que la compañía está dispuesta a continuar con este bloque de vecinos hasta que puedan disfrutar de su ascensor.
Actualización
A fecha 8 de julio, la empresa ha abonado las cantidades solicitadas por la comunidad de vecinos.
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